*Para muchos es un deporte significativo, por las distintas habilidades artísticas que refleja; sin embargo, nuestro departamento no ha logrado destacarse de manera ejemplar quedando al borde de ser un ejercicio casi extinto.
En la deportividad del Magdalena, en donde muchas disciplinas se destacan, el Taekwondo lucha por encontrar su sitio, y es que su presencia se desvanece en medio de un escenario negativo pues la falta de apoyo gubernamental ha sumido a esta práctica en una total omisión.
Históricamente arraigado en la región, el Taekwondo alguna vez floreció como una expresión de disciplina y superación personal para sus practicantes. Con un legado de atletas destacados y logros memorables, hoy se enfrenta a desafíos que amenazan su continuidad.
La realidad actual revela una situación desafiante para los practicantes de este arte marcial en el Magdalena. La carencia de apoyo por parte de las autoridades deportivas y gubernamentales ha generado un panorama desolador. La ausencia de programas de formación, escasez de recursos para el entrenamiento, y la falta de espacios adecuados para la práctica se han convertido en obstáculos insuperables para el desarrollo del Taekwondo en la región.
El impacto de esta carencia de respaldo se manifiesta en múltiples dimensiones. Los talentos emergentes carecen de incentivos y estructuras que les permitan nutrir su potencial, dejando sus habilidades latentes y sus sueños de representar al Magdalena en competiciones nacionales e internacionales en un segundo plano.
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Además, los clubes y academias dedicados a esta disciplina luchan día a día para mantener viva la llama del Taekwondo. Con esfuerzos independientes, intentan sortear la falta de recursos, buscando alternativas para seguir enseñando y preservando los valores inherentes a este deporte.
En medio de esta realidad desafiante, surge una pregunta urgente: ¿cómo rescatar y revitalizar el Taekwondo en el Magdalena? La respuesta yace en la necesidad imperiosa de un compromiso conjunto entre entidades gubernamentales, instituciones educativas y la sociedad civil. La creación de programas de apoyo, la asignación de recursos para infraestructura y el fomento de competiciones locales son pasos esenciales para devolverle el lugar que merece a esta disciplina.
Es fundamental reconocer el potencial transformador del Taekwondo en la vida de los jóvenes, no solo como una práctica deportiva, sino como una herramienta para el desarrollo integral. Su filosofía de respeto, disciplina y superación personal lo convierten en un vehículo idóneo para forjar líderes y ciudadanos ejemplares.
En última instancia, revivir el Taekwondo en el Magdalena no solo implica un retorno a sus raíces deportivas, sino también la oportunidad de inspirar y empoderar a generaciones venideras. Reconociendo su valor intrínseco y su capacidad para moldear vidas, se abre la puerta hacia un futuro donde esta disciplina retome su lugar como un símbolo de grandeza y superación en la región.
En los Juegos del Eje Cafetero la primera medalla obtenida por el departamento del Magdalena la brindó el Taekwondo deporte que no tiene el apoyo necesario para su progreso, sin embargo, por medio de la lucha y entrega de los participantes, se destaca que Magdalena puede contar con profesionales de alto rendimiento en este deporte.
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Por Miguel Manjarres Navas
Redactor de EL INFORMADOR