La joven habló de su mamá al confesar el verdadero motivo por el que le da miedo alzar su voz en las calles.
La inquietud empezó a invadir a los usuarios luego de verla en diferentes puntos de Barranquilla donde cientos de personas se movilizaron, con la intención de saber en qué podía colaborar en cuanto a alimentos o bebidas que necesitaran.
Después de recibir varias preguntas relacionadas con el mismo tema, la hija de la excongresista Aída Merlano, prófuga de la justicia colombiana, decidió confesar el verdadero motivo por el que no sale a las calles para alzar su voz.
En su confesión recalcó que ella no le debe nada a nadie, pero el temor que siente en realidad está relacionado con la situación de su mamá y los enemigos que dejó en el camino.
“La razón por la que yo no salgo a marchar es básicamente para no dar papaya, porque yo no le debo nada a nadie, pero mi mamá dejó muchos enemigos cuando se fue. Entonces, por querer joderla a ella, me pueden pegar mi matada fácilmente, y quedo rifada porque dicen: ‘Ay, murió en el paro’. Esa es la razón por la que yo no salgo a caminar, ni me manifiesto de esta manera “, expresó en las historias de su perfil de Instagram.
Pese al temor que siente, la barranquillera no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados, motivo por el que habló también de la manera como está intentando apoyar a los manifestantes en diferentes puntos de la capital del Atlántico.
"Vine al plantón para saber qué es lo que la gente necesita y de qué manera yo, económicamente, puedo ayudar. Con agua, con comida, con bicarbonato, con leche. Había gente allí que estaba plantada con hambre, que no ha desayunado, que no ha comido y que está allí", concluyó Aida.