Guillermo Vives llevó a Bogotá desde 1998, tiene un restaurante que ofrece comida costeña preparada de la forma tradicional. Obviamente se llamó Gaira, tributo al proyecto que había montado en 1992 en su Santa Marta del alma.
La combinación entre la comida, la música tropical y la decoración crean un ambiente acogedor y una atmósfera de fiesta que recuerda la alegría del Caribe. Se recomienda pedir de entrada un patacón o una carimañola. La ensalada gaireraes muy buena y la sopa de tomate es una de las mejores de la ciudad.
Este es el primer café de recuerdos local del país, donde además de encontrar buena comida, podrán disfrutar de la mejor música en vivo de Colombia y del mundo.
Un templo que le rinde culto al músico colombiano, al clásico y al contemporáneo; ese lugar al que hay que regresar cuando con el trajinar del día tras día se nos empieza a difuminar el sentimiento de colombianidad. ¡Buena comida, buena música!
Fue fundado como un restaurante de comida costeña tradicional y con el paso del tiempo y una enorme pasión por la música, sus dueños decidieron ampliar el café y abrir lo que hoy se conoce como GML Auditorio, un espacio en donde se puede disfrutar de grandiosas presentaciones musicales en vivo. Es una combinación de buena comida y buena música, que se ha convertido en un templo que rinde culto al músico contemporáneo colombiano y del mundo.
La carta ofrece riquísimas entradas dentro de las que se recomienda probar el patacón samario, guineo acompañado de carne desmechada, pollo o guacamole. La carimañola también resulta una buena opción (zeppelín de yuca relleno de carne o queso).
Podemos seguir degustando sopas y ensaladas o pasar directamente a los platos fuertes, donde encontramos una gran variedad de exquisitas opciones. Entre los mariscos se recomienda el plato del Chino Vives, camarones en salsa de ostras y piña, acompañados de arroz cucayo. Luego, entre las carnes, el Pibe Angus, bife de chorizo importado, se lleva toda la atención.
Entre los platos de la casa se destacan: la posta negra de tía Mary y tía Ceci, una exquisita punta de anca al estilo cartagenero con arroz con coco. Otra delicia, el plato de la cocinera; carne ripiada con cucayo y trocitos de plátano maduro, ensalada de aguacate y tomate, cierra otro plato de la casa Piñón de Ramonita; especie de lasaña de carne con plátano maduro y queso mozzarella gratinado.
Sin duda alguna,Gaira Café es un lugar para disfrutar del mejor entretenimiento en vivo y comida de la ciudad, y nos invita a siempre a ser parte de Colombia con orgullo.
De la Costa para el mundo, comida y entretenimiento
Del fogón de su chef Guillermo Vives, sale directo al plato lo que en Gaira se ofrece como el resultado de las más arraigadas raíces culinarias de la costa Caribe y Colombia; influenciado por diversos viajes por el mundo “con un sentimiento nacional por preservar nuestras tradiciones”, según la gente de Gaira. Alrededor de la comida hay shows en vivo de artistas nacionales y objetos especialmente pensados como parte del decorado, que no pueden más que despertar la nostalgia de cualquier colombiano.