La selección apropiada de las lámparas es indispensable para iluminar los espacios. Acá algunas recomendaciones para hacerlos brillar…
Las lámparas son elementos indispensables en la decoración, ya que permiten crear ambientes cálidos y alegres. De mesa, pie o techo… todas tienen su propio atractivo y desprenden un encanto especial.
La combinación de distintos tipos de lámparas ayuda a conseguir una iluminación agradable, a crear ambientes y hacer las casas o apartamentos aún más bonitos.
Sin embargo, siempre debe haber una luz general, una lámpara que ilumine la habitación de forma completa, combinada con luces funcionales para destacar puntos específicos y, por último, crear un ambiente más acogedor con luces ambientales que aporten profundidad a la habitación.
A continuación algunos consejos para encontrar el modelo perfecto para el hogar.
¿Por dónde empezar?
Antes de comprar una lámpara, hay que tener en cuenta una serie de aspectos. Lo más importante es sopesar la decisión con calma, para conseguir un resultado adecuado. Se debe pensar: ¿Dónde se instalará?, ¿Hay espacio suficiente? ¿Dónde están las conexiones?
Reconocer los tipos de lámparas
Lámparas de mesa
Las lámparas de mesa destacan por un diseño extravagante y son perfectas como objeto decorativo. Gracias a su luz indirecta, se consigue un extra de calidez, sobre todo, cuando actúan como luz de fondo o secundaria. Son perfectas para leer o coser cerca del sofá o para dar más sensación de profundidad a la habitación.
Consejo: el pie de la lámpara debe ser dos tercios de la altura total y la pantalla el tercio restante.
Lámparas de pie
Las lámparas de pie ayudan a conseguir una atmosfera cómoda y llaman la atención. Las lámparas de pie abiertas en la parte superior y con pantallas traslúcidas proporcionan una luz suave, mientras que los modelos abiertos por abajo y con luz focal son perfectos para los rincones de lectura.
Consejo:
Se debe medir la zona en la que será puesta la lámpara antes de comprarla. La altura de la lámpara y de los muebles debe ser similar para conseguir un resultado armonioso.
Lámparas pegadas al techo
Las lámparas pegadas al techo son funcionales. Se puede diferenciar entre lámparas de techo con luz directa e indirecta. Los halógenos son ideales para zonas de trabajo o de paso como la cocina, el baño o el pasillo gracias a una luz clara y focalizada. Las lámparas con pantalla o plafones proporcionan una luz homogénea y más elegante. Combinadas con otras fuentes de luz, las lámparas de techo otorgan mayor profundidad a la habitación y brillan con todo su esplendor.
Consejo: se debe considerar la altura del techo, los nuevos edificios suelen tenerlos más bajos, por lo que es mejor recurrir a lámparas pegadas al techo que ocupan poco espacio.
Lámparas colgantes
Las lámparas suspendidas son prácticas y decoran como pocas. Ahora se llevan las lámparas colgadas muy bajas y colocadas sobre la mesa del comedor o la encimera de la cocina. Las clásicas arañas de lágrimas siguen siendo imprescindible para aquellos que busquen un interior más opulento y glamuroso.
Consejo: Se debe medir la altura del techo y compararla con la longitud de la lámpara. Las arañas recargadas quedan especialmente bien en techos altos (3,0 – 4,5 metros). Aunque esté de moda colgar las lámparas más bajas, es importante no excederse para impedir golpes o deslumbramientos.
Lámparas de pared
Las lámparas y apliques de pared son ideales para conseguir un ambiente elegante y discreto que permita una iluminación indirecta que juegue con la pared. También hay lámparas de pared focalizadas que sirven para iluminar y destacar obras de arte, leer en la cama… Los apliques de pared quedan muy bien en pasillos o en la terraza.
Consejo: Las luces de pared no pueden iluminar una habitación por sí solas, por lo que es importante combinarlas con otras lámparas o instalarlas solo para zonas de paso que no se quieran dejar totalmente oscuras.
Recomendaciones generales
*Una habitación de tamaño normal necesita tres fuentes de luz distintas, mientras que en espacios más grandes se pueden emplear hasta cinco a la vez.
* Apostar por una mezcla equilibrada de luces fuertes y suaves para crear un ambiente relajante. Algunas zonas necesitan más iluminación que otras, por eso encontrar el contraste adecuado confiere ese toque acertado.
* Una buena solución para un cambio rápido, es reemplazar la pantalla de las lámparas. Los distintos modelos permiten actualizarlas conforme a la temporada o el gusto personal y enseguida proporcionan un nuevo aire a la habitación.