Sequía deja las primeras reses muertas en Lorica, Córdoba

La sequía ha afectado la producción lechera porque los pastos en las fincas se están muriendo, provocando aumentos en los precios del queso, suero y la mantequilla.

Córdoba
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Aún se desconoce la cifra exacta de animales muertos porque las fincas están distantes y están a la espera de reportes.

En las poblaciones de Providencia y Villa Concepción, en zona rural del municipio de Lorica, Córdoba, el ganado está sufriendo porque la sequía arrasó con el pasto y agua que había en las represas y pozos, ocasionando la muerte y el debilitamiento de los animales.
Ever Delgado, presidente de la Junta de Acción Comunal, dijo que aún se desconoce la cifra exacta de animales muertos porque las fincas están distantes y están a la espera de reportes.

Una situación parecida ocurre en la margen izquierda del municipio de Montería, según lo confirmó el dirigente comunal, Alfredo Ceballos, quien dijo que las reses se están quedado atascadas en los pozos porque están débiles.
La sequía ha afectado la producción lechera porque los pastos en las fincas se están muriendo, provocando aumentos en los precios de la libra de queso que de 5.ooo pesos pasó a 8.000 pesos, al igual que el suero y la mantequilla.
El año pasado murieron más de 50 mil reses en Montería, Los Córdobas, Puerto Escondido, San Pelayo, Lorica, Moñitos y San Bernardo del Viento, generando pérdidas económicas.

Los organismos de socorro y la Corporación Ambiental de los Valles del Sinú y del San Jorge (CVS), reportaron que en la mayoría de municipios del departamento están en alerta máxima por amenaza de incendios forestales ocasionados por las altas temperaturas y los fuertes vientos.

En el departamento de Córdoba fue declarada la calamidad pública para atender con celeridad las emergencias por cuenta de la sequía.

Los municipios con escasez de agua son: Cotorra, Canalete, Moñitos, San Bernardo del Viento, Puerto Escondido, San Antero, Montería, Momil, Los Córdobas, Cereté, Chimá, Lorica, San Pelayo y Tuchín, donde la sequía y altas temperaturas acabaron con el agua que había en los reservorios, pozos y represas, porque no se almacenó lo suficiente en la temporada invernal.