Polémico huésped

Columnas de Opinión
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger

Escrito por:

José Lopez Hurtado

José Lopez Hurtado

Columna: Opinión

e-mail: joselopezhurtado13@yahoo.es



La credibilidad mundial de Estados Unidos quedó seriamente afectada después de la invasión a Irak, cuando se dijo que Saddan había enriquecido su poderío nuclear que colocaba en grave riesgo la estabilidad de Occidente.

La "guerra preventiva" entonces, justificó todas las operaciones militares, que aún hoy subsisten, pese a la retirada de sus efectivos, dejando tras sí, miles de víctimas, pérdidas millonarias en dólares y un futuro incierto para el país invadido y para los propios veteranos de guerra. Nunca existió realmente un peligro, ni tampoco indicios de una escalada nuclear, y una vez más se insinuaron por parte de Washington, otros intereses ocultos, "la política aritmética de los negocios de los gringos", de la cual hablaba Bolívar.

Hoy parece vivirse condiciones similares, luego que la OIEA, Organismo Internacional de la Energía Atómica, señalara hace algunos días que Irán había comenzado la producción de uranio puro al 20%, que en el criterio de algunos países, entre ellos Francia, está más allá de los límites previstos para considerar que su destino sea para fines pacíficos.

La tensión que comienza a generarse "coincidió" con una visita del Presidente iraní a Cuba, Nicaragua, Venezuela y Ecuador, la quinta durante su mandato, y a las mismas naciones que en el seno de la ONU votaron negativamente la condena que el organismo impuso al régimen islámico por tortura, crueldad, trato inhumano y degradante, recurrentes violaciones a los derechos humanos, violencia contra las mujeres y permanentes discriminaciones contra minorías religiosas y étnicas. Algunos observadores sin embargo, señalarán que también en Occidente y en algunos de los países visitados por el líder islámico, gestores del Nuevo Socialismo siglo XXI, se presentan graves abusos contra los derechos humanos, en particular contra quienes no son afectos a las ideas de esos regímenes.

Si bien Admadineyad pareciera haber perdido a Brasil como uno de sus allegados en América Latina, después de los afectos cultivados con Lula, y por el contrario viendo cómo, por ejemplo, se redujo en un 70% el comercio con el país suramericano por la nueva posición de rechazo al régimen islámico por parte de Rusoff, motivo que hizo que lo excluyera de su gira, también lo es que en su visita a la Isla recibió un sólido respaldo por parte de Castro a su política nuclear, siempre y cuando esta estuviera dirigida a fines "pacíficos", y no obstante, las severas advertencias del exlíder cubano, según trascendió, de un probable ataque nuclear de E.U. e Israel.

No puede olvidarse en este punto, para mirarlo en perspectiva, cómo Fidel en el pasado había recriminado la política antisionista y la posición de Admadineyad sobre el "holocausto" judío. Se recuerda que desde la Revolución Islámica de 1979, Irán no reconoce a Israel como Estado soberano, endilgándole la condición de régimen sionista, sin derecho a ser una nación.

Como fuere, la visita del mandatario iraní, además de los convenios económicos que se suscribieron, en Venezuela, instalación de fábricas de cemento, satélites, alimentos, tractores, bicicletas; para Cuba, créditos incrementados a 500 millones de euros, destinados a energía, biotecnología, etc., busca recuperar, así sea en mínima parte, el espacio político perdido y el aislacionamiento a que Washington lo querrá someter en el curso de los próximos días, cada vez con mayor intensidad con el concurso de sus aliados y en particular de la Unión Europea.