En debates pasados se realizaron todas las denuncias posibles, se alertaron a las autoridades, se previno a la Registradora por parte de los candidatos que aspirábamos a curules en corporaciones públicas en Ciénaga Magdalena por la trasparencia del debate electoral en elecciones de años anteriores pero nada, todo salió al revés,
Actualmente la democracia en Ciénaga es una palabra sin contenido.
En elecciones pasadas esta ciudad otrora progresista y habilitada con gente de honor, mostró el trasfondo del descredito a donde ha llegado trashumancia, compra de voto, intimidación, fraude en todas sus modalidades, y lo ultimo una fábrica de cedulas, que produjo más de 8.000 según algunos, que permitían el nacimiento de electores o la resurrección de muertos, en fin que la tecnología creada en Ciénaga, dio lugar a una Registraduría alterna, en esta población cienaguera ostentemos el penoso de ser los más hábiles estafadores de la voluntad popular, y en donde más se violan los mandamiento de la democracia.
Es aquí donde se consume sin que nada suceda, todos los delitos en materia electoral y cada vez es lo mismo sin que se le ponga coto a esta situación.
Participé por primera vez en el debate del 2004 con la firme convicción de cambiar las costumbres políticas de mi pueblo, aspirando llegar al Concejo, para contribuir a la coadministración municipal, con la esperanza de que otros candidatos nuevos, con una mentalidad, distinta y con deseo de lograr un mejoramiento social y un avance en la educación y la salud, que nos permitieran avanzar en la consecución de una Ciénaga progresista, con mira al desarrollo y la recuperación de la credibilidad y trasparencia de sus instituciones, pero la gente todavía y debo ser honesto, no ha captado ese mensaje pleno de las personas que quiere servirle con desinterés y trasparencia a su tierra, es que ya desde dos días antes de las elecciones se tiene escogido los candidatos, inderrotables, y representantes eméritos pero cuya ejecutoria nadie las conoce.
A los cienagueros buenos a la gente decente, a los verdaderos amantes de su terruño, nos queda un sabor por todas estas cosas que increíblemente las autoridades no descubren, para señalar tanto a los autores intelectuales, como a los materiales porque estoy seguro que el día de la justicia ponga tras las rejas, a estos violadores del querer popular, y se le sancione con todo el peso de la ley, y se cuide por parte del estado la gestión de los servidores públicos y se garantice la imparcialidad y la trasparencia, para Ciénaga vendrán mejores días para nuestras familias, y la comunidad en general, volverá a resplandecer la democracia y todos tendremos las oportunidades que hoy reclamamos con toda entereza. A pesar de todo seguimos adelante y la lucha que ya empezamos no obstante todas las dificultades, con la generosidad del pueblo saldrá avante.
No habrá más demora para establecer los cambios que se requieran con urgencia, ni contemplaremos el espectáculo de no saber quiénes fueron los elegidos democráticamente con honestidad y pulcritud en los comicios. Es necesario que el pueblo cienaguero se levante contra los impostores y diga basta ya a tanta infamia, a tanto chanchullo, a tanta corrupción, que en la Registraduría Nacional se acabe la politiquería en la escogencia de sus miembros o delegados que favorezcan a esos candidatos que ofrecen las jugosas sumas de dinero, que designen gente imparcial que sean prenda de garantía y respeto por las entidades.
Todavía hay tiempo, para un propósito común, queremos una Ciénaga donde se nos referencie no solo como gente culta y proba, sino como respetuoso de la voluntad del pueblo soberano como antes.
Alguien tiene que protestar que las autoridades concluyan con las investigaciones que se anuncian con tanto despliegue en cada debate electoral, porque de otra forma no avanzaremos nada y no es bueno que muera la esperanza.
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