La privacidad perdida (I)

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Melchor Tirado Torres

Melchor Tirado Torres

Columna: Derecho Penal

e-mail: melchortiradot@gmail.com


El internet soportando múltiples aplicaciones… ¡eureka, que buen invento creado en el año 1958 con la fundación del Arpa¡, aplicación esta que evolucionó y sobre la cual se implementan múltiples desarrollos y programas trayéndonos “mucho progreso en las comunicaciones”, ya a estas alturas es imposible no ser usuario del Internet, y yo diría que “el analfabeta actual, es el que no lo maneje al menos en forma elemental”, pues bien, mis respetados y queridos amigos lectores con la llegada del internet para bien de la humanidad, porque ya pudimos comunicarnos de manera global, y eso es bueno…
también nos llegó de manera casi obligatoria la “pérdida de nuestra privacidad” y eso es malo, y paso a comentarlo y a explicarlo así: sabían ustedes que “todavía” no existe una ley global que proteja la privacidad de nuestros datos en general… siempre que usemos el internet estaremos vigilados con múltiples propósitos, esta vigilancia se inicia desde el momento en que para poder haces uso de cualquier aplicación “supuestamente gratis” (en el único sitio donde existe lo gratis es en el diccionario y eso hay que comprarlo, fuera de él, todo, todo, ojo, absolutamente todo, tiene un precio y hay que pagarlo, nos guste o no) o comprada nos presentan “el contrato de afiliación o contrato de aceptación”, contrato este que casi nunca, o mejor nunca leemos y el cual esta precedido con dos opciones así: a) acepta usted este contrato, o b) no acepta usted este contrato, con estas dos opciones Usted debe de escoger una y aquí viene la “trampilla oculta subrepticia”, si usted escoge no acepto no le permiten bajar la aplicación “gratis”, por lo que como necesita la aplicación escoge, si acepto, y al hacerlo “da el consentimiento para que todos sus datos sean usados como mejor le parezca a la empresa dadivosa que le regaló la aplicación…! Y aquí aplica el eslogan…

“si te dicen que el producto que te dan es gratis, es porque el producto eres tú”; los proveedores “de lo gratis” luego vende a una empresa de mercadeo todos nuestros datos porque nosotros al firmar el contrato de aceptación ya dimos previamente el consentimiento, manifestando que efectivamente ya hemos leído el contrato cuando nunca se hace. Es de aclarar que si la aplicación es comprada Usted puede interactuar con el vendedor y eliminar la o las cláusulas que violan su privacidad, garantizando así en el futuro una demanda para el vendedor, si este, a sabiendas de que existe una prohibición vende o suministra sus datos a cualquier empresa de mercadeo o de seguridad; pero, a estas del articulo ustedes se estarán preguntando ¿pero qué es lo que se vende o suministra a las empresas de mercadeo o de seguridad? Con la siguiente respuesta: se venden nuestros hábitos de compra, nuestros deseos insatisfechos, nuestra información de amigos, nuestra información de negocios, nuestra información de juegos, nuestra información financiera, nuestra información familiar, ect…

Todo, absolutamente todo lo que se monte o llegue al internet queda almacenado en uno o varios servidores… ¿hay alternativas de solución?, ¿hay forma de protegernos?… Con la respuesta de que si, y la misma desarrollare en el artículo siguiente… Espérenlo. Reitero toda la información que las empresas regaladoras de productos y aplicaciones nos dan es utilizada con múltiples propósitos comerciales y de seguridad; la inquietud y la preocupación sería, ¿bueno y qué hacer ante este panorama negro y aterrador?, ¿hay alternativas de solución?, ¿hay forma de protegernos?… con la respuesta de que si, y la misma desarrollaré en el artículo siguiente La privacidad perdida (parte 2)… espérenlo.