Ahora que Arturo Char está a punto de ser elegido presidente del Senado se acaba de entregar a la justicia su protegida, Oneida Pinto alcaldesa de Albania, encontrada culpable de corrupción por contratos irregulares. Todos recordamos la famosa fotografía en la cual el senador Char de manera desafiante posaba con Oneida al entregarle el aval de su partido como candidata en esa contienda electoral.
Es difícil de entender cómo se puede llegar a posiciones como la presidencia del Senado con semejantes historias de falta de criterio, por decir lo menos, al escoger representantes de su partido en posiciones públicas. Lástima que Carlos Fernando Galán no esté en el Senado de la República sino en el Concejo de Bogotá. Fue el quien se opuso como presidente de Cambio Radical en ese momento a la postulación de Oneida Pinto y a quien, como lo mencionan los medios de comunicación, retó Fuad Char por oponerse a su postulación. Las palabras de Char, padre de Arturo, deberían haber causado conmoción entre la gente honesta de la región Caribe que es la gran mayoría, porque afirmó que la postura de Galán lo que demostraba era que sus palabras obedecían a no conocer a la gente de la Costa. Pero no pasó nada.
En momentos donde el Congreso de la República pasa por su peor momento, entre otras por su ausencia en medio de la crisis que vive el país como consecuencia de la pandemia, se esperaría que llegaran a ese recinto no solo los más capaces sino los más transparentes. A todas las dudas anteriores sobre Arturo Char se suma su historia cono senador de la República. Es uno de sus mayores ausentistas en el Senado y sus aportes hasta ahora brillan por su ausencia. Todavía queda la vaga esperanza de que esta cantidad de pormenores de su actuación como político y como miembro del Congreso, generen las suficientes dudas de manera que a pesar de las presiones de la mayoría y sobre todo del gobierno del presidente Duque, que es aliado de los Char, no lo elijan.
El riesgo que está corriendo la Región Caribe con esta elección, es la de aumentar aún más su desprestigio en el campo político ahora que un nuevo congresista costeño, el senador Pulgar del partido de la U, está denunciado por Daniel Coronell quien hizo público un video donde este personaje ofrece 200 barras porque lo que él hace, según sus propias palabras “es un negocio:” Política y negocios no van juntos y eso es un mensaje muy oportuno en estos momentos.