Es EL INFORMADOR, sin duda, un grande referente periodístico de Santa Marta y el departamento del Magdalena. En sus 59 años de existencia, en el que han llegado nuevos tiempos, tendencias y tecnologías, hemos procurado ver siempre tales adelantos como nuevos comienzos para no quedarnos atrás y estar a tono con la evolución y dinámicas propias de un mundo que se mueve cada día y cada vez con mayor vertiginosidad. Escribe y traduce en sus páginas este diario la crónica de la ciudad, el departamento, la región, el país y el mundo, como desde aquel 7 de agosto de 1958, fecha de su fundación, adentrándose permanentemente en los novedosos conceptos que surgen, como es el caso de la multimedia de hoy para que sus contenidos sean consumidos a través de los modernos elementos que actualmente se disponen.
Entraña para sus lectores la noticia con análisis, la ágil lectura, la colaboración pluralista, el periodismo responsable y oportuno, como lo quisiera siempre su Fundador, Don José Benito Vives de Andreis, hombre epónimo y visionario, a quien debemos haber asomado nuestra ciudad a la modernidad. Hoy este periódico es mucho más que un diario impreso, toda vez que converge ahora con plataformas digitales. Somos vanguardia, hacemos parte de nuestra historia. Tenemos ganado y asegurado un lugar de preeminencia entre los consumidores de información en tiempo real y en un todo armónico que desplaza información veraz. En la lectura de sus páginas impresas de ayer a hoy, se dibuja el camino que hemos seguido en estos 59 años, desde lo local a lo universal, con innovación editorial, de diseño y presencia informativa.
Hemos sido ejemplo a través de los años, por informar oportuna, confiable, equilibrada y objetivamente, lo que refrenda ante todos nuestro liderazgo, constituyendo lo cual una clara muestra de que la misión informativa en todos los ámbitos será permanente por parte este Diario, que ha tenido siempre entre sus finalidades la búsqueda de la transparencia, la rendición de cuentas y la democracia efectiva a favor de la sociedad, cuidando igualmente de llegar a ella con contenidos y objetivos en lo que estén presentes informar, entretener y emocionar a nuestros lectores entre otros particulares y generales aspectos, situaciones y consideraciones.
Cuenta para ello con un gran equipo profesional que trabaja en eficientes instalaciones. Estamos a un año de ser sexagenarios, lo que indica que es hoy es un buen día para celebrar, agradecer el esfuerzo, empeño y lealtad de todos quienes trabajan y colaboran en y con EL INFORMADOR, pero igualmente, es un buen momento para reflexionar sobre los retos y oportunidades que tenemos en el futuro inmediato.
La competencia por lectores y anunciantes. Audiencias y clientes segmentados con gustos y necesidades disímiles. Una economía global en la incertidumbre. Países otrora omnipotentes debatiéndose entre deudas, déficits, alzas de impuestos y desempleo galopante. Una tecnología avanzando raudamente. Grandes empresas de todos los sectores creando contenidos y consolidando redes sociales. Pero nosotros seguiremos ahí, sin temores ni miedos, por cuánto nos apasiona el trabajo y permanentemente recurrimos, conscientes de lo cual, a la innovación y la dedicación.
EL INFORMADOR, concebido desde su inicio como un periódico para todos en el que se consignaran y reflejaran los hechos, fuera ponderada la información política y se potenciara con creces el debate de las ideas, ha sido fiel a tales preceptos, y por ende, mantenido incólume y cierto en el severidad que impone la responsabilidad de informar bien, mejor, y en la información de opinión; en el entendido que sin libertad no hay democracia, toda vez que ella, la libertad, impone responsabilidad, en lo que hemos sido dignos por haber sabido responder al uso que hemos hecho de esa grandiosa facultad, honrada con plenitud de conciencia.
Hace 59 años cambiamos la forma de hacer periodismo en nuestro medio, hoy la consolidación de EL INFORMADOR hace que su valor histórico se amplifique y se reconozca. Hace 59 años nos distinguimos y diferenciamos por introducir modernas técnicas en la impresión, así como en publicar información de interés público y publicidad, lo que produjo la multiplicación de lectores, a la vez consumidores de bienes y servicios. Hoy seguimos a la vanguardia, no desistimos, miramos de frente el porvenir de la difusión y las comunicaciones y afrontamos sin temores ni prejuicios aquello de contender sanamente e ir tras la conquista de loa avances más significativos que vienen sucediéndose con inusitada rapidez en los espacios donde se toman las decisiones políticas y económicas, especialmente por cuanto comprendemos que la verdadera revolución es la transformación, que viene dada por las nuevas tecnologías; pero eso sí, sin dejar de reconocer nuestra más pura tradición periodística, fusión con la que seguiremos escribiendo sin descanso y con objetividad, la cada día nueva historia de la que queremos ser partícipes como testigos de excepción.
Sirva este aniversario para reiterar nuestro compromiso de seguir trabajando con mayor intensidad y creatividad que hasta hoy, para superar los obstáculos y desafíos por difíciles que los mismos sean. Confíen nuestros lectores y anunciadores que en comunión de esfuerzos aplicaremos planes de trabajo contentivos de una profunda reingeniería de procesos en todas las áreas que nos son inherentes y que nos facilitarán, amén de permitirnos ser mayormente productivos y eficientes, a efecto de poder ofrecer un mejor producto en ruta a satisfacer los objetivos de todos ustedes, lectores, clientes y anunciantes.