Cuando me hablan de un modelo de papá pienso inmediatamente en el padre misericordioso de la parábola del Hijo Prodigo (Lucas 15,11-32). Es un padre que permite que su hijo tome las decisiones de manera autónoma, así estás no sean las mejores y le vayan a ocasionar dolor. Sabe que la libertad es un valor innegociable y que tiene que ayudarle a ser alguien autónomo y libre. Es generoso, le da lo que el hijo no ha trabajado. Es consciente de su obligación de padre que sostiene y mantiene a su hijo para que esté pueda alcanzar los recursos que requiere para ser autosuficiente.
No lo sobreprotege. Lo deja vivir las consecuencias de sus acciones. El decidió irse y malgastar la herencia y ahora tiene que vivir las consecuencias de su decisión. El padre seguro sufre por eso, pero no va a exonerarlo de su responsabilidad. Sabe que no hay nada que forme más que el tener que ponerle la cara a los errores y tener que asumir las situaciones adversas que las decisiones ocasionan. Lástima que hoy abundan los papás que sobreprotegiendo a sus hijos tratan de excusar su falta de presencia y de trabajo. Tenga la certeza que a distancia nadie forma. Hay que estar presente y compartir a diario con los hijos.
Lo perdona. Cuando el hijo decide volver, el padre lo recibe. La descripción del evangelio es muy hermosa, dice que se conmueve interiormente al verlo, que lo abrazó, lo besa y lo alista para la fiesta de la reconciliación. Ese es un verdadero padre el que sabe perdonar y dar una nueva oportunidad, el que no tiene miedo de decirle al Hijo, te amo y quiero que seas feliz, aquí estoy para ayudarte. Así como lo dejo ir y lo dejo vivir las consecuencias de sus acciones, así lo recibe con toda la fuerza del corazón y lo ayuda a seguir adelante.
Ojalá los que hoy me lean sean capaces de cuestionarse y de entender que ser papá no es simplemente aportar un gameto masculino para la concepción ni dar muchas cosas materiales sino acompañar, compartir, amar, corregir, escuchar, guiar y todo lo que implica el compartir diario. Ser papá de lejos no es buena idea. Hay que estar presente y hacerle sentir con el calor de corazón todo lo que se siente por ellos.
Lamento tanto que el modelo de papá de hoy sea Homero Simpson, la caricaturización del papel de padre. Él encarna todo lo que un padre no debe ser. Pero estoy seguro que a muchos le gusta imitarlo porque así la vida es más fácil y tienen menos compromisos y sacrificios en la vida diaria. La mamá es fundamental en el proceso de crianza, pero no lo es todo. Se necesita la presencia del padre. Si dos los hicieron dos los crían.
Bendigo a todos los padres y los invito a dar lo mejor por sus hijos. Es necesario que entendamos que hay muchas dinámicas sociales que tienen que cambiar si queremos tener hijos sanos y felices. No podemos seguir viviendo la vida con tanta superficialidad como lo estamos haciendo hoy creyendo que lo material, el lujo, el pechiche es lo mejor para criarlos. Te bendigo y te deseo lo mejor.