Colombia: hacia un país de altos ingresos con movilidad social

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Escrito por:

Germán Vives Franco

Germán Vives Franco

Columna: Opinión

e-mail: vivesg@yahoo.com



El título de esta columna es el del estudio presentado por el BID en el que plantea unas estrategias para alcanzar un ingreso promedio anual per cápita de 30.000 en 15 años. El estudio, de lo dicho por el Presidente del BID en una entrevista, es una aplicación de la ortodoxia económica a la situación colombiana.


Afirma Moreno: “Lo primero es conseguir consensos sobre temas fundamentales. Me refiero a la necesidad de pagar más impuestos, de invertir más en educación o de dedicarle en forma sostenida recursos al desarrollo de la infraestructura, para solo citar unos temas. Eso tiene que estar enmarcado en compromisos de transparencia en el manejo de los recursos, porque la percepción de corrupción es la que más daño le hace a la democracia colombiana. Por eso proponemos un pacto por la eficiencia.”
Y ante la pregunta sobre ¿De dónde sacar los recursos para invertir?, respondió: “La respuesta es una sola: de los impuestos. El esfuerzo tributario de los colombianos tiene que ser más alto. Pretender que construir una sociedad mejor nos puede salir gratis es ilusorio.” Es deplorable que el Presidente del BID venga a decirnos que el agua moja.
La línea del discurso de Moreno sugiere que el único propósito del estudio es ambientar la reforma tributaria que se avecina. Varias frases durante la entrevista así lo confirman, entre esas esta: “Pero la verdad es que lo que proponemos es realmente una inversión rentable: asumir un sacrificio para tener un país mejor, que es el mejor negocio que podemos hacer.”
En síntesis, el objetivo del estudio es prometer que en 15 años el colombiano promedio estaría ganando 30,000 dólares anuales, siempre y cuando acepte la andanada de impuestos que quiere el Gobierno. Moreno incluye esta perla: “Parte del trabajo que hay que hacer incluye decir la verdad, y lo cierto es que pagamos menos impuestos que el promedio de América Latina y que nuestras necesidades son inmensas.” ¡Como si América Latina fuera modelo de desarrollo económico a seguir!
La verdad doctor Moreno, ya que las verdades no solo hay que decirlas sino también hay que escucharlas, es que es inmoral aumentar la base tributaria haciendo que paguen impuestos colombianos que a duras penas ganan lo suficiente. (1.500.000 mensual). Estos impuestos lograrían que familias tengan menos ingresos disponibles para educación, salud, entretenimiento, entre otras necesidades. Es inmoral subir aún más el IVA, cuando es claro que esto afecta más a las familias con menos ingresos.
Es inmoral y ofensivo pedirles a los colombianos que se “sacrifiquen” mientras enormes recursos de todos se desaparecen por culpa de la corrupción o la incompetencia o ambas. ¿Le suena Reficar?
Explíquele doctor Moreno a una familia que gana 1.500.000 mensual que tiene que pagar más impuestos para financiar la paz y el costo de la reinserción, o para mantener el tren de gastos de un gobierno que se resiste a apretarse el cinturón acorde con las circunstancias.
La verdad doctor Moreno, es muy fácil desde Washington o desde los centros de poder de la capital, ver solo números y deshumanizar los problemas de nuestra sociedad. Es muy fácil pensar en cuadrar las cuentas del Gobierno ignorando el sufrimiento que se le causa al colombiano promedio, y ¿a cambio de qué?
No solo es inmoral sino también una gran mentira decir que en 15 años Colombia puede tener un ingreso per cápita promedio de 30.000 dólares. En el escenario más optimista, lograríamos estar entre los 10 y 15 mil dólares.
La verdad es que por el camino de los impuestos en vez de inclusión social, se logrará mayor exclusión y una profundización de la brecha socio-económica. Lo que propone el estudio es un ataque a los pobres y a la clase media. Movilidad social sí, pero hacia abajo. Es hora de que el Gobierno y las elites que gobiernan desde la capital comiencen a tratarnos como ciudadanos y no como súbditos.
Lo decente es que hablemos de impuestos solo después de que el Gobierno corte gastos y después de que se haya eliminado la corrupción y la incompetencia en el manejo de los recursos públicos. Hacerlo antes es prematuro e inmoral. Esta es la verdad.