Por una verdadera política pública de salud

Editorial
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A pesar de las advertencias, de las alarmas prendidas constantemente, de las constantes llamados para evitar el consumo de cigarrillo, hasta de las pobres políticas públicas de salud en el país, El consumo de cigarrillos causa 351.000 muertes por año en ocho países de Latinoamérica, además de demandar costes por casi 50.000 millones de dólares anuales asociados a la atención de las enfermedades provocadas por el tabaquismo.

Argentina, Brasil, México, Colombia, Costa Rica, Perú, Ecuador y Chile, países que representan el 80 % de la población de Latinoamérica y el Caribe, son los países con los más altos índices de consumo de cigarrillo, vicio que degenera en una enfermedad que acaba con las personas, socavando y acabando con ellas, en un proceso en donde el ser humano termina en forma deplorable.

Las cifras son aterradoras y dan miedo, pero pareciese que los consumidores de cigarrillos no tuviesen miedo de llegar a engrosar estas cifras mortales tan altas; 351.000 muertes al año son atribuibles al tabaquismo en estos ocho países, lo que representa el 12,4 % de todas las muertes en adultos mayores de 35 años. Asimismo, fumar causa 2,2 millones de casos de enfermedades al año, entre otras, 130.000 casos de cáncer y 899.000 eventos cardiovasculares.

A pesar de que en las últimas décadas hubo un descenso relativo en la proporción de personas que fuman, todavía el tabaquismo sigue siendo una epidemia que enferma y mata. De hecho, cada día, en estos países, mueren casi 1.000 personas por esa causa, y, la principal regla de oro a poner en práctica, es no quedarse  con los brazos cruzados, porque la lucha debe ser diaria y constante.

En Argentina, Brasil, México, Colombia, Costa Rica, Perú, Ecuador y Chile,  los costes que el tabaquismo suponen para los sistemas de salud y la economía, incluyendo los gastos directos de atención médica de las enfermedades que ocasiona, la productividad laboral perdida y los cuidados familiares, ascienden a un total regional de 49.800 millones de dólares, cifra  que se puede utilizar en otro tipo de inversión que genere trabajo, para la prosperidad de estos pueblo o también puede ser utilizada para diseñar e implementar verdadera y ciertas leyes y normas,  políticas públicas de salud, que de verdad sean las mejores para luchar contra este flagelo que azota a los ciudadanos en gran proporción.

Uno de los componentes que más llama la atención, son los costos directos por 22.800 millones de dólares en atención médica de las enfermedades que produce el cigarrillo, lo que implica que hasta 1 de cada 10 dólares destinados a salud en los presupuestos de los países se destina a paliar las consecuencias del tabaquismo. El coste total anual en la región supera en más de diez veces la recaudación promedio en los países por impuestos al tabaco.

Si se aumentara ese impuesto y se adoptaran otras medidas para desalentar el consumo de tabaco, como la imposición de ambientes libres de humo, en los próximos 10 años se podrían evitar cerca de 300.000 muertes y recortar en 90.000 millones de dólares los costes asociados al tabaquismo.