Defensor de la democracia, la libertad y los derechos humanos

Editorial
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger


Ha habido muchos hombres públicos hispanoamericanos que han defendido con firmeza, ahínco y personalidad los sistemas democráticos; pero, en estos últimos dos últimos lustros sobresale un político venezolano cual es Antonio Ledezma, quién ha sufrido en carne propia las atrocidades del régimen dictatorial que impera en Venezuela. Fue encarcelado, sometido a los acostumbrados vejámenes y al aniquilamiento moral y físico mientras permaneció en el encierro.

Pero, en forma subrepticia, logró escaparse de esas celdas inhumanas en donde se violan abiertamente los derechos humanos. Fue una evasión de película de suspenso en la cual corrió todos los riesgos habidos y por haber, pero tuvo tan buena suerte que logró llegar a territorio colombiano.

Es un personaje transparente, honesto, auténtico y buen administrador como pudo demostrarlo cuando estuvo como Gobernador del Distrito Federal de Caracas y por elección al frente de la Alcaldía metropolitana de Caracas; esa capital durante los dos períodos como Burgomaestre alcanzó un gran desarrollo urbanístico, un impulso en el campo social y económico que hace contraste con la deprimida Caracas de hoy. 

Ha sido uno de los más jóvenes legisladores pues a los 23 años estaba en el ejercicio de esas funciones. Ha recibido premios y distinciones por la defensa de los Derechos Humanos como el otorgado por el Congreso de los Estados Unidos, el Sajarov en el 2018 del parlamento europeo y el de derechos humanos y democracia cuyo otorgamiento se produjo en Ginebra Suiza.

También ha sido escritor y una de sus obras relevantes la cual tuvo su lanzamiento hace unos meses en Madrid España la dedicó al expresidente Carlos Andrés Pérez, dos veces primer mandatario de los venezolanos, a quien conoció muy de cerca puesto que fue su secretario privado. Era tal su vínculo de amistad con el expresidente que la única persona que acompañó su cadáver desde Atlanta en Estados Unidos hasta Caracas, fue Antonio Ledezma. Ese libro dado el interés de la gente por leerlo fue puesto en venta en dos ediciones. 

Nuestro excelso y extinto expresidente Alberto Lleras, el gran estadista entre los estadistas afirmaba: “la sencillez es grandeza” y esa es justamente una de las características que posee en grado sumo Antonio Ledezma.

Por las anteriores aseveraciones que hemos expuesto realmente frente al futuro inmediato es la persona de más prestigio político, de más madurez intelectual, de mejores antecedentes profesionales y personales y de mayor experiencia parlamentaria y administrativa; en consecuencia, debería ser el candidato de la oposición para las próximas elecciones presidenciales que van a tener lugar en la patria bolivariana.  

Si por circunstancias de fuerza mayor no fuese su candidatura la de mayor respaldo electoral, su apoyo será vital a quién aparezca como el de más opción para conseguir el triunfo en las urnas.

Recientemente dictó en Madrid una conferencia de mucha audiencia en Iberoamérica habida cuenta de que fue grabada en directo para los países cercanos a su corazón. Ciertamente el éxito fue indiscutible por el tema y el diagnóstico claro que puso de presente de las democracias de América hispana. Su buena y diáfana disertación abrió los ojos a los asistentes presenciales y virtuales y a quienes sufren las dictaduras comunistas desde hace décadas y los que hace poco están viendo despedazar sus sistemas democráticos como Chile, Perú y nuestra querida Colombia. 

Toda su ilustrativa charla debidamente documentada en libros de autores que han desmenuzado y analizado esta problemática derivada desde hace muchos años por el comunismo internacional que últimamente sigue las directrices a cabalidad del grupo de Sao Paulo y el grupo de Puebla.

Todo lo que está ocurriendo en nuestro entorno hispanoamericano mediante el cual se ha posicionado el socialismo del siglo XXI es fruto no de la corrupción, ni de los malos gobiernos sino del cumplimiento al pie de la letra de todas las consignas, cartillas y franquicias que se han señalado y que han cumplido como acostumbran entre los marxistas en planes a corto, mediano y largo plazo. 

Ellos no improvisan, sino por el contrario se inmiscuyen en las universidades y centros culturales, en los medios de comunicación.  Gozan del apoyo de Rusia, China, Irán y de todos los grupos narcotraficantes y sediciosos como Hezbolá , la Farc, el Eln y dominan con los softwares las entidades electorales en cada país. Pero conociendo lo que está pasando de fuentes fidedignas y con seriedad integral como la del personaje digno de este escrito podemos enfrentar el porvenir inmediato de nuestras naciones. 

Tenemos que prepararnos para desmontar los regímenes totalitarios; no podemos entregarnos.