Compromiso con el Pacto de Leticia

Editorial
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Los gobiernos de seis países amazónicos extendieron su compromiso con el Pacto de Leticia, firmado en septiembre de 2019 por sus presidentes para coordinar la preservación de los recursos naturales de la zona más biodiversa del mundo.

Este evento se cumplió durante el cierre de la Tercera Cumbre Presidencial por la Amazonía-Pacto de Leticia, en la que reinó el consenso de que el compromiso se mantiene y se extiende y debe llegar con más recursos, cuando se participe con más ánimo por parte del sector privado, que ya ha entendido cuál es el alcance, y se ven grandes estructuras de la filantropía ambiental del mundo decididas a aportar recursos.

En la cumbre, participaron virtualmente los presidentes de Colombia, Iván Duque; de Ecuador, Guillermo Lasso; Guyana, Irfaan Alí, y Suriman, Chan Santokhi, así como el vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, y el ministro de Ambiente de Perú, Rubén Ramírez también intervinieron la asesora para Alianzas e Iniciativas Climáticas del Departamento de Estado de Estados Unidos, Cristine Dragisic; la secretaria general de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica, Otca, María Alexandra Moreira, y el presidente del Banco Interamericano De Desarrollo, BID, Mauricio Claver-Carone y el presidente Duque estuvo acompañado por el ministro de Estado del Pacífico y Medio Ambiente del Reino Unido, Zac Goldsmith.

El Pacto de Leticia fue firmado para fortalecer la acción coordinada para luchar contra la deforestación y establecer mecanismos para enfrentar de forma conjunta las bandas criminales transnacionales que arrasan la selva.

En ese sentido, lo que se busca son bionegocios para el desarrollo bajo en carbono, acceso a capital para proyectos, mitigación y adaptación pero sobre todo trabajar de la mano con las comunidades indígenas y las mujeres emprendedoras. Todos los países reunidos están respaldando el fortalecimiento de la Otca,  como herramienta institucional para el trabajo en terreno, pero estan igualmente respaldando las iniciativas desde el BID, que permiten movilizar recursos, para atender los problemas de la región.

La cumbre fue una nueva oportunidad para reafirmar el compromiso de los países participantes con la protección de una de las principales comunidades ecológicas del planeta y para fortalecer la implementación de los mandatos acordados en el pacto, ademas, El Pacto de Leticia reconoce el valor estratégico de la Amazonía para la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad a nivel global; sin embargo, hay un falso dilema entre preservar y desarrollar la Amazonía que solo podrá ser superado cuando conservación ambiental, crecimiento económico y el progreso social estén en consonancia bajo el marco del desarrollo sostenible.

Un bioma con las proporciones de la Amazonía puede y debe ofrecer oportunidades de prosperidad a sus habitantes. Ese progreso social solo se consolidará, sin embargo, cuando esté asociado a políticas que respeten y fortalezcan los compromisos ambientales y que mantengan la vigilancia firme e incansable sobre la deforestación ilegal y otros ilícitos y con esto se busca  un acuerdo para conservar y usar sostenible la biodiversidad y sus bosques húmedos tropicales.



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