Las bolsas europeas han bajado con fuerza ayer lunes, ante el temor a un nuevo confinamiento por el aumento de los casos de coronavirus, que ponga en peligro la recuperación de la economía.
Los pronósticos de las segundas olas o rebrotes como han sido calificados por la Organización Mundial de la Salud, OMS, son una realidad en el viejo continente y por eso el organismo pide a los países europeos coherencia regional y acciones coordinadas contra la situación muy seria ante un nuevo pico de la pandemia.
En las últimas dos semanas, más de la mitad de países en Europa registró un incremento de casos de más del 10 % y en siete de ellos incluso se duplicaron. Las restricciones y el temor a nuevos confinamientos aumentan en Europa ante la segunda ola de coronavirus. España, el país con más casos de la UE, tiene en Madrid el epicentro de la pandemia, y a partir del lunes hay 850.000 personas con limitada libertad de movimientos. Mientras, el Reino Unido advierte que se está en un punto crítico.
Así, mientras los países europeos se reblindan de los efectos de la Covid-19 como por ejemplo estudiar medidas más restrictivas e incluso nuevos confinamientos, América Latina que ya cuenta con 8.652.417 positivos y 327.207 muertes busca reactivarse económicamente ante los grises pronósticos de la Ocde.
Ante este panorama las bolsas bajaron : Fráncfot bajó un 4,37 %; Milán, 3,75 %; París, 3,74 %; Madrid, 3,4 % y Londres un 3,38 % y el índice Eurostoxx50 de las 50 empresas de mayor capitalización ha bajado un 3,94 %.
Las ventas se incrementaron en los mercados europeos de renta variable ante el temor de nuevo brotes de Covid-19 que pudieran obligar a un nuevo confinamiento en Madrid, París o Londres.
Las noticias que apuntan a una recuperación de la economía, como la recuperación de la economía alemana en el tercer trimestre tras la fuerte caída en el segundo, no fueron suficientes para frenar la caídas. Además, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, recordó que la economía de la zona del euro todavía no ha salido de la crisis y necesita el apoyo de estímulos fiscales y monetarios.
La oleada de ventas se contagió a los mercados del otro lado del Atlántico y Wall Street abrió con notables pérdidas en su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, que caía un 2,82 % a la hora del cierre de los mercados europeos, al tiempo que el selectivo S&P 500 retrocedía un 2,10 % y el índice compuesto del mercado Nasdaq, en el que cotizan las principales tecnológicas, bajaba un 1,33 %.
El precio del petróleo intermedio de Texas, WTI, bajaba el 4,90 %, hasta 39,29 dólares, y el crudo Brent caía un 4,225 % hasta 41,33 dólares por barril, ante el temor a que las nuevas restricciones contra la pandemia de coronavirus afecten a la demanda mundial de crudo.
El euro cayó a 1,1736 dólares, después de las palabras de Lagarde y la onza de oro bajaba un 2,70 % hasta 1.909,20 dólares y el Banco Central Europeo, BCE, fijó el tipo de cambio de referencia del euro en 1,1787 dólares.
Ahora el euro ha presentado una tendencia bajista frente al dólar por la aversión al riesgo de los inversores, que también se reflejó en la caída de los mercados de valores. El dólar se ha apreciado frente a muchas divisas porque se considera una inversión segura en momentos de incertidumbre, ya que la economía de la zona del euro todavía necesita el apoyo de los estímulos fiscales y monetarios.
La segunda ola de contagios de Covid-19 en Europa y los nuevos confinamientos anunciados, no solo han llevado a los inversores a evitar el riesgo, sino al ciudadano del común, a algunos, a tomar sus propias precauciones, a pesar de que otros siguen sus ritmos de vida y hasta llegan a protestar por los aislamientos preventivos.