No soy yo quien invita a tu fragancia
A que invada mi almohada todas las madrugadas.
Como adolescente enamorada
Asiste puntual a la cita.
Tres de la madrugada, mi ilusión se pierde entre sabanas y cobijas
Mi alma ya no se preocupa por si las lavan o las cambian
Como anteriormente lo hacía
A esta hora, todos los días
Cae una lluvia de nostalgias
Las cartas y las fotografías aumentan mi melancolía.
Les pido que se vayan !
Pero se enredan en mi memoria
Como arbustos en las paredes.
No he encontrado en otras mujeres
Eso que tú tienes
Que sabe a fiesta y melancolía
A alegría y a tristeza
Esa cosa fría que hoy se mete en mi cabeza
Pero que mañana se calienta,
Me hace ver estrellas,
Y me saca de la monotonía.
Que contradicción esta vida mía
Sufro cuando te tengo y sufro cuando no eres mía
Eres la fantasía que mi realidad va consumiendo
No sé si te quiero
O es mi cuerpo el que te extraña noche y día.