Hoy 40 años de la toma a la embajada de República Dominicana en Bogotá

En la acción el M-19 secuestró a diplomáticos de numerosos países que departían en una fiesta conmemorativa de la independencia de la República Dominicana,

Judiciales - Nacional
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El hecho fue perpetrado por 12 guerrilleros del M-19, quienes ingresaron en cuatro grupos de cuatro, liderados por el entonces guerrillero, Rosemberg Pabón, alias de ‘Comandante Uno’.

A las 12:10 de la tarde, se cumplirán exactamente 40 años de una de las acciones armadas ejecutadas por la guerrilla del M-19 más recordadas en Colombia, cuando a través de que ellos llamaron ‘Operación Libertad y Democracia’ se tomó a mano armada la embajada de la República Dominicana en Bogotá.
En esa oportunidad, el grupo subversivo secuestró por 55 días a diplomáticos de numerosos países quienes asistían a la fiesta de conmemoración de la fiesta de Independencia de ese país, plagio que culminó el 25 de abril de ese año cuando secuestradores y secuestrados fueron enviados a Cuba, donde los rehenes fueron liberados y los guerrilleros quedaron aislados y desmovilizados.

El hecho

Las informaciones que se manejaron a su momento indicaron que, la acción subversiva fue adelantada por cuatro grupos integrado cada uno de estos con cuatro guerrilleros vistiendo ropa deportiva haciéndose pasar como jugadores que regresaban de la cancha de fútbol de la Universidad Nacional que estaba ubicada contigua a la sede diplomática.
Seguidamente uno de los supuestos invitados, quien resultó ser Rosemberg Pabón, alias de ‘Comandante Uno’, sacó un arma de fuego con la que disparó al aire y seguidamente dio a conocer de qué se trataba la situación.

En las instalaciones, hacían presencia 16 diplomáticos de alto rango, entre los que figuraban los embajadores en Colombia de Austria, Brasil, Costa Rica, Egipto, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Israel, México, República Dominicana, Suiza, Uruguay, Venezuela y el nuncio apostólico.
Fueron cuatro grupos integrados por cuatro personas cada uno, los que tomaron la embajada.
Fueron cuatro grupos integrados por cuatro personas cada uno, los que tomaron la embajada.

El objetivo

Tras la toma, el grupo guerrillero exigió al gobierno de Julio César Turbay la liberación de 300 prisioneros políticos quienes habían sido arrestados durante el conflicto armado y por el robo de armas, como también exigieron al gobierno que pagara US$50 millones de dólares.

La presión sobre el presidente Turbay escaló por parte de altos mandos militares y políticos que pedían que se rescatara militarmente a los rehenes por asalto.
Cuatro días después de la toma, el gobierno colombiano autorizó contactos directos con el comando guerrillero. Como portavoz por el grupo guerrillero M-19 fue asignada, Carmenza Cardona Londoño, alias ‘La Chiqui’, mientras que los representantes del gobierno, Ramiro Zambrano Cárdenas y Camilo Jiménez Villalba. La reunión se llevó a cabo dentro de una camioneta que estacionaron frente a la embajada. El embajador mexicano estuvo también presente como testigo.

El presidente Turbay solicitó la cooperación de la Comisión de Derechos Humanos de la OEA para que ayudara a una solución jurídica de la toma, lo cual acordaron. Una Comisión Especial de funcionarios diplomáticos de países que tenían rehenes lideradas por el nuncio apostólico de la Santa Sede en Argentina, Monseñor Pío Laghi, actuando como delegado del papa Juan Pablo II visitó a la Comisión en sus oficinas del Hotel Tequendama para intentar alcanzar una solución favorable a la repercusión internacional.
En total se llevaron a cabo alrededor de 24 reuniones entre los representantes del gobierno y los representantes del M-19.

El evento se mantuvo en los titulares de los medios de comunicación internacionales de la época. El entonces líder del M-19, Jaime Bateman Cayón mencionó que la propaganda política generada por el asalto había sido más eficaz que una operación guerrillera armada, ya que les había dado mayor protagonismo internacional y que lo que tenían que lograr después era tratar de mantener a los guerrilleros con vida durante la toma de la embajada.

Desenlace

Después de 52 días de negociaciones y 61 días de haberse iniciado la toma, alias ‘Comandante Uno’ y los representantes del gobierno acordaron que dejarían ir al comandante y los guerrilleros junto con los secuestrados a Cuba el 25 de abril de 1980. Una vez en Cuba, los embajadores de los respectivos países serían dejados en libertad. Se decía que el M-19 también habría recibido un pago por el gobierno colombiano, pero se habían fallado en el objetivo que era liberar a más de 315 presos políticos, quienes fueron amnistiados dos años después en el gobierno de Belisario Betancur.

Rosemberg Pabón, alias ‘Comandante Uno’ quien lideró la toma guerrillera permaneció viviendo en Cuba hasta marzo de 1990, cuando por un tratado de paz y el llamado a una nueva Asamblea Nacional Constituyente, la guerrilla del M-19 se convirtió en un partido político.