El secuestro fue en septiembre de 2004 y su cadáver encontrado cinco meses después en una fosa sellada con concreto.
El requerimiento en su contra se produjo luego las investigaciones adelantadas señalaran a Granda como como uno de los autores intelectuales del hecho que para esa época conmocionó a la comunidad paraguaya.
Las informaciones que se conocieron a su momento, indicaban que el antes mencionados haría parte de la banda integrada por miembros del brazo armado del Partido Patria Libre, quienes se autodenominaron Ejército del Pueblo Paraguayo, EPP, que plagió a la mujer y quien cinco meses más tarde apareciera muerta en una fosa tapada con cemento en la que habría sido enterrada viva, según los resultados forenses.
El grupo delincuencial que se inició como como asaltante de bancos el 21 de septiembre del 2004 interceptó a la empresaria y la mantuvieron retenida y luego exigieron una millonaria suma de dinero para dejarla en libertad, pero su familia no accedió por lo que fue asesinada.
Diarios de ese país, publicaron a su debido momento que, el macabro hallazgo se produjo mediante labores de allanamiento a una vivienda ubicada en el sector conocido como Mbocayaty en la ciudad de Ñemby, tras las denuncias hechas por la comunidad en las que manifestaban que en el sitio había movimientos con gente extraña.
Las implicaciones del exjefe guerrillero colombiano se derivan de las informaciones recopiladas por las autoridades nacionales de los computadores encontrados al excomandante de las Farc, Raúl Reyes, en medio de un bombardeo a un campamento en límites entre Colombia y Ecuador.
El diario La Nación de Asunción dio a conocer para ese tiempo que, Osmar Martínez, señalado como uno de los organizadores del Partido Patria Libre, junto a Anuncio Martí y Juan Arrom se habrían trasladado a Venezuela y en donde tuvieron reuniones con Granda y otros miembros de las Farc, en donde se habría fraguado la estrategia para que terminó con el secuestro y muerte dela empresaria Cubas.