La situación que atraviesa la economía internacional, a consecuencia de la guerra Rusia-Ucrania en Europa, la subida de la inflación en Estados Unidos, y la incertidumbre de los mercados financieros globales ante un futuro imprevisible, está elevando la demanda de oro como manera de inversión segura.
El año 2022 arrancó con importantes subidas de precio, con un aumento del 5 por ciento a finales de enero, llegando a situarse después en 2.000,86 dólares (1.839 euros) la onza (31,10 gramos) en el mercado asiático, según esta firma (www.coininvest.com) que es parte de la corporación estadounidenses StoneX.
Esta subida, un máximo histórico y el precio más alto del oro desde septiembre de 2020, es una señal de que los inversores buscan un refugio ante el impacto del conflicto ruso-ucraniano, y convierte al metal precioso en una de las inversiones más rentables en este momento, según el equipo de metales preciosos de CoinInvest.