La situación, que ha sido objeto de preocupación durante varios años, tiene a los pobladores en estado de alerta ante el riesgo de un desastre de gran magnitud.
Los residentes del corregimiento de Mata de Caña, perteneciente al municipio de El Banco, Magdalena, viven con temor e incertidumbre debido a la constante erosión provocada por el río Magdalena, que día tras día consume más terreno de la comunidad.
A pesar de los esfuerzos realizados por el gobierno municipal, los habitantes denuncian que los recursos y las intervenciones aplicadas no han sido suficientes para detener el avance del río. La comunidad solicita de manera urgente que tanto las autoridades departamentales como nacionales se involucren en la situación, con medidas más efectivas que mitiguen el impacto de la erosión.
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Los residentes en Mata de Caña temen por la pérdida de sus viviendas, sino también por las áreas destinadas a la agricultura, principal sustento económico de la zona. La velocidad con la que el río ha ido carcomiendo el terreno ha puesto a la comunidad en una situación crítica, que requiere atención inmediata.
En este llamado de auxilio, los habitantes insisten en que es necesario actuar antes de que las consecuencias sean irreversibles, y piden a las autoridades competentes tomar cartas en el asunto para proteger el futuro del corregimiento y de sus familias.