Informe entregado por la Unidad de Parques, señala que la reserva natural sigue siendo el atractivo más importante del departamento del Magdalena.
Por: Miguel Manjarrés
Redacción: EL INFORMADOR
El Parque Nacional Natural Tayrona se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más visitados en Colombia, según datos de Parques Nacionales, durante este 2024 alrededor de 630.000 personas visitaron el centro natural generando un incremento anual sostenido desde el 2005, exceptuando los años de pandemia.
La conservación de la biodiversidad es uno de los principales pilares en la gestión del Parque Tayrona. El Programa de Monitoreo Ambiental y Cultural ha sido clave para proteger las especies emblemáticas y los ecosistemas del área. Entre las actividades más destacadas se encuentra el monitoreo de mamíferos medianos y grandes, así como del paujil, una especie indicadora de la buena conservación de los ecosistemas.
Así lo confirmó la entidad, en diálogo con EL INFORMADOR, tras el interrogante en el que se mencionan:
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¿Qué medidas se toman para proteger la biodiversidad y el equilibrio ecológico del parque?
Parques Nacionales, para registrar la presencia de estas especies, se han implementado recorridos y la instalación de cámaras trampa, lo que ha permitido obtener datos sobre la fauna del parque.
Además, se monitorea el recurso hídrico para garantizar su uso sostenible y evitar afectaciones a los afluentes del área. La restauración ecológica también juega un papel importante, y en cinco sectores del parque se han sembrado aproximadamente 13.000 árboles de bosque seco tropical y manglar.
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Atractivos turísticos y rutas guiadas
Por otro lado, el Tayrona ofrece a los visitantes 23 playas y dos senderos terrestres, siendo Bahía Concha, Playa del Muerto, Cabo San Juan y Piscina Natural los destinos más frecuentados.
El sendero más visitado es el Kogui, que conecta los sectores de Cañaveral y Arrecifes. Aunque el guión no es obligatorio para grupos pequeños, en los senderos de senderismo subacuático es necesario contar con la compañía de la comunidad local, quienes garantizan que los corales no se vean afectados por el turismo.