Los moradores de estas zonas del sur del departamento ven como las aguas que hoy inundan sus calles amenazan con ingresar prontamente a sus humildes viviendas.
El desbordamiento del río Magdalena mantiene en alerta máxima a las autoridades del municipio de El Banco luego de que sus aguas inundaran las calles de los corregimientos de El Cerrito, Belén, Los Negritos y Guacamayal.
La creciente del afluente que se mantiene en 9 metros con 10 centímetros a la altura del puerto, también ha inundado la zona comercial de este municipio del sur del Magdalena.
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Inundaciones en Belén
Desesperada se encuentra la comunidad del corregimiento de Belén al ver como las aguas del rio Magdalena inundan sus calles y amenazan con meterse a sus casas y hacerlos perder todo.
Los altos niveles del río mayor junto al río Cesar y la Ciénaga de Zapatosa, vienen causando inundaciones en zonas bajas del corregimiento.
Pobladores de esta comunidad pesquera instan a las autoridades locales y Departamentales a tomar las medidas de apoyo a los afectados.
Inundaciones en Los Negritos
El afluente también amenaza con arrasar al corregimiento de los Negritos, ubicado en la vía que comunica a El Banco con Guamal, por lo que sus habitantes hacen un llamado a sus mandatarios.
Mientras estas ayudas llegan, la comunidad por sus propios medios trata de contener la fuerte corriente del río en el brazo de Mompox.
El llamado es para las autoridades locales, departamentales y nacionales, se puedan apersonar con maquinaria y material urgente, debido a que la erosión, la fuerte corriente ya se ha llevado parte de la tierra y del caserío.
En la misma situación se encuentran los habitantes del corregimiento de Guacamaya, zona rural de El Banco, donde una creciente súbita del río Magdalena, brazo de Mompox, causó inundación, ocasionando que varias familias resultaran afectadas.
Las inundaciones también vienen afectando los cultivos de los campesinos, mientras que las calles se encuentran inundadas.
Hay que recordar que la creciente del río sobrepasó la altura que decreta la alerta máxima, mientras que aún se desconocen el número oficial de damnificados en estas poblaciones.
Los habitantes de estos corregimientos hacen un llamado a las autoridades locales, departamentales y nacionales, para evitar que el agua inunde sus viviendas.