La demolición de los muros, lo cual no estaba contemplado desde que comenzó la recuperación del Camellón, generó un sinsabor entre los samarios.
La Empresa de Desarrollo y Renovación Urbano Sostenible EDUS, fue la encargada de realizar este acto, que según ellos, hace parte del proyecto de restauración de este representativo espacio, que por muchos años ha sido orgullo de propios y visitantes.
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Aunque la EDUS por medio de sus redes sociales diga que el Proyecto del Camellón de la Bahía cuenta con aprobación del Ministerio de Cultura y que “la balaustrada o cerramiento de la escultura se retiró porque no es un bien de interés cultural con valor patrimonial”, la decisión ha causado mucho descontento entre la población samaria, que por más de 50 años ha visto estos muros rodear la emblemática estatua.
“Creo que con los muros la estatua se veía muy bonita, además de brindarle protección. Este es un sitio donde venía con mis hijos a que vieran las olas del mar, y nos sentábamos por buen tiempo a contemplar la estatua y hablarles un poco de la historia de Rodrigo de Bastidas. Todo ese espacio hace parte de nuestra historia, de nuestra cultura, no me pareció bien que demolieran los muros de esa manera, después de tantos años de estar rodeada por ellos. Esto es una profanación a la cultura”, expresó Silvia García, habitante de Santa Marta.
Aunque la demolición se hizo con los debidos permisos, el encerramiento de esta escultura estuvo desde el año 1965, considerándose ya, parte de la Bahía de Santa Marta.
Cabe recordar que tras el comienzo de los trabajos de recuperación del Camellón de la Bahía, anunciado desde el 2019, la Fundación de Periodistas Bolivarianos de América emitió un comunicado dirigido a la alcaldesa, Virna Johnson, en el que le solicitaban evitar la demolición del cercamiento ubicado alrededor del monumento del fundador de la ciudad, por su gran valor histórico y cultural.
Al respecto de eso, EDUS, quien aclaró que en ninguna estancia el proyecto consideró la demolición del cercamiento ni de la estatua misma, hoy demuestra lo contrario.
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