El obispo de la Diócesis de Santa Marta, monseñor Luis Adriano Piedrahita, dijo que ha solicitado reunirse con la alcaldesa de Santa Marta, Virna Johnson y el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, para socializar con ellos los posibles protocolos de bioseguridad que necesariamente deben adoptarse para posibilitar la reapertura de los servicios religiosos de forma presencial en los templos de la ciudad.
El prelado recalcó que la prueba piloto se hará cuando los índices de contagios por coronavirus bajen en la capital magdalenense; mientras tanto, hasta nueva orden, se seguirán utilizando las transmisiones por medios virtuales aprovechando las distintas redes sociales, las cuales han servido de utilidad por parte de la feligresía.
Sin embargo, en otras parroquias del departamento ubicadas en los municipios de Algarrobo, Remolino, Concordia, Zapayán y Salamina, ya dieron inicio al plan piloto debido a que son municipios en los que no se han registrado casos y que no se ha propagado en gran medida el coronavirus desde que inició la pandemia.
Hasta este lunes que pasó, en Pedraza no se había presentado ningún caso de Covid-19, por lo que ya se reportó y darán la orden de cerrar las iglesias de esa región.
Monseñor viene sosteniendo reuniones con los sacerdotes a su cargo y ha requerido la gestión de los alcaldes de esas municipalidades para que hagan cumplir con las normas de bioseguridad establecidas por el gobierno nacional.
Por el momento, monseñor insistió en que se sigan aplicando las medidas de protección y bioseguridad para evitar que el coronavirus continué expandiéndose y generando mayores afectaciones a las comunidades.
