Los sectores turísticos de Santa Marta comienzan a ver la afectación del cambio climático. En la mañana de este lunes, el balneario de El Rodadero amaneció con una gran cantidad de material orgánico a raíz de las denominadas praderas de fondo marino.
La situación que se registró en una de las playas más visitadas durante la época de vacaciones, se debe en gran parte al deterioro del ecosistema y al cambio de dirección de las corrientes marinas. El hecho alertó a propios, turistas y autoridades distritales.
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Frente a este hecho, el Departamento Administrativo de Sostenibilidad Ambiental -Dadsa-, inspeccionó la playa y acompañó a la empresa a Essmar a la jornada de recolección del material orgánico que, sorprendió a toda la comunidad del sector turístico.