Los colores tienen un gran significado en la vida, nos impulsan a desarrollar y experimentar diferentes sensaciones.
La psicología del color enseña a analizar con profundidad la percepción y el comportamiento que asumimos ante los colores. Desde nuestra infancia somos estimulados con su variedad, intensidad y significado. Así que nuestra personalidad se ve influenciada fuertemente por ellos.
Naranja
Sin duda un color que activa nuestra felicidad y entusiasmo ante la vida. Aporta energía a nuestra personalidad, movilidad y dinamismo. Representa juventud, frescura, optimismo y efectividad.
Amarillo
Está asociado con la risa, esperanza, luz y mucha energía. Eleva nuestro vigor y estimula nuestro humor, así como nuestro estado de ánimo. Nos impulsa alegría, seguridad, fuerza y libertad. También nos ayuda a vencer el temor ya que nos hace sentir más seguros.
Rojo
El rojo representa calidez y dinamismo nos inspira amor y pasión pero también enojo y peligro. Aumenta nuestro entusiasmo e intensidad. Activa nuestro buen ánimo y nos mantiene fuertes ante alguna amenaza. Fortalece nuestra autoestima y determinación. Además, en mercadeo se utiliza mucho para representar el hambre.
Púrpura
Representa creatividad, calma y alivio. Nos permite disminuir los niveles de nerviosismo. Está asociado con el romance y misterio. Además, nos aporta energía y devoción.
Azul
Nos conecta con nuestra área espiritual pero también nos llena de calma y confianza. Fortalece nuestra identidad, nos mantiene serenos pero al mismo tiempo activos (dependiendo de su intensidad). Además, nos inspira bondad, mansedumbre y templanza.
Verde
Una clara representación de inspiración, paz, armonía, conexión con la naturaleza. También representa a los nuevos comienzos. Contribuye a nuestro crecimiento personal, aumenta nuestra seguridad y estabilidad mental.