1) Cuidar el colesterol: el aumento de los niveles de colesterol total y sobre todo del llamado “malo” (LDL) constituye un poderoso factor de riesgo para el desarrollo de aterosclerosis.
2) Realizar actividad física: el ejercicio es siempre recomendable. El aeróbico (caminata, correr, nadar, gimnasia, bicicleta) es lo ideal para practicar al menos tres veces a la semana y por lo menos 45 minutos.
3) No fumar.
4) Controlar la presión: en general debe mantenerse por debajo de 140/90 mmHg. En el país, la hipertensión afecta a una de cada tres personas y se presenta con casi el doble de frecuencia en los grupos con ingresos económicos más bajos. Quitar el salero de la mesa puede hacer reducir la tensión arterial entre dos a ocho mmHg.
5) Comer pescado: es una fuente de proteínas de alto valor biológico y contiene grasas insaturadas saludables, iodo, fósforo y más vitaminas del grupo B que las otras carnes. Tener en cuenta que la merluza, el lenguado, el abadejo, la brótola y el mero son aconsejables para bajar de peso; mientras que si se necesita cuidar el colesterol, lo ideal es elegir atún fresco o en agua, salmón, abadejo, pez espada y evitar sardinas, calamares, mejillones y langostinos.
6) Cuidado con el sobrepeso y la obesidad.
7) Ser inteligente a la hora de elegir los alimentos: evitar las frituras, las grasas animales, optar por las carnes magras o las blancas.