En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: les aseguro que si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda solo; pero si muere, da mucho fruto.
El que tiene apego a su vida la perderá; y el que no está apegado a su vida en este mundo, la conservará para la Vida eterna.
El que quiera servirme que me siga, y donde yo esté, estará también mi servidor. El que quiera servirme, será honrado por mi Padre.
Reflexión: Ser cristiano implica mostrar a Jesús en el ser y en el quehacer de nuestra vida, para que así sus mensaje sea siempre atractivo para las personas con las que compartimos a diario.