Soldados del Ejército Nacional realizaron labores de limpieza en la zona aledaña a la institución y quitaron los grafitis que habían sido dejados por el grupo subversivo.
El retorno a clases se cumplió el martes de esta semana y no el lunes como de costumbre, a solicitud del Ejército que pidió una tregua de 24 horas mientras ellos realizaban las labores de limpieza de los grafitis y el retiro de una bandera que el grupo sedicioso había dejado anclada en la entrada del plantel y se hacía un reconocimiento de la zona.
Los muchachos llegaron como de costumbre en un ambiente de camaradería con discretos comentarios casi en secreto sobre la acción subversiva, pero el ingreso a sus salones de la Institución Educativa rural Nro. 12 no tuvo ningún inconveniente.
Sin embargo, luego de que se conociera de la llegada del grupo guerrillero por primera vez a la escuela Vocacional, como se le conoce desde sus inicios, algunos padres de familia comenzaron a reconsiderar la continuidad de sus hijos en dicha institución y en la mañana de este miércoles al menos tres estudiantes fueron retirados del plantel por temor a que esa organización subversiva los reclute.
Entre tanto, en la población se vive una situación tensa aunque tranquila. El mismo lunes cuando se celebraba una misa por el primer mes del fallecimiento de uno de sus habitantes, el mismo sacerdote se notaba intranquilo y aprovechaba las pausas para dar un vistazo por las ventanas cuando alguien se aproximaba al templo.
Poco a poco en Carraipía tanto chicos como adultos tratan de recuperar los ánimos y ya comenzaron a realizar las actividades previas a lo que será la celebración del carnaval el próximo fin de semana, dejando atrás el desagradable episodio que los intimidó a todos.
