El hombre, secuestrado en la mañana del miércoles de la semana pasada, llegó a su hogar en la noche del domingo, luego de pasar cuatro horas caminando en zona rural.
Luego de conocerse en la noche de este domingo la liberación del ganadero guajiro José Ramón Molina Peláez, el gobernador (e) Jhon Fuentes Medina, en compañía del brigadier general, Miguel Eduardo David Bastidas, comandante de la Décima Brigada del Ejército Nacional y el coronel Henry Manuel Sandoval, comandante de la Policía del Departamento manifestaron que las indagaciones de este hecho seguirán en marcha.
Además, las autoridades manifestaron que la liberación se dio por medio de un plan candado, ejecutado por uniformados de diferentes unidades, quienes recolectaron información necesaria para llevar a cabo un operativo focalizado en una zona de la península y fue esta presión la que obligó a los captores a liberar a Molina Peláez.
“Los responsables se vieron ahogados y dejaron ir a su víctima, quien llegó a su casa sano y salvo, es importante mencionar que la investigación continua con el fin de llevar a los delincuentes ante la justicia para que respondan por este crimen” aseveró el coronel Henry Sandoval.
Además, el comandante de Policía Guajira mencionó que las primeras indagaciones de este hecho dan cuenta que los responsables de este secuestro pertenecen a una organización criminal común, investigación que está coordinada con funcionarios de la Fiscalía General de la Nación.
Igualmente, el alto mando expresó que el modus operandi de este hecho es diferente al de los otros casos presentados en lo corrido del año, es decir, que el secuestro del ganadero no tendría relación con los flagelos presentados en el 2019.
Al día de hoy, cuatro personas han sido secuestradas en La Guajira, de las cuales todas gozan de libertad, dos liberadas por los captures y dos rescatadas por uniformados.
El ganadero llegó a su hogar el domingo en la noche.
Libertad de José Ramón Molina
Después de caminar durante cuatro horas, el ganadero oriundo de Distracción, José Ramón Molina, llegó al seno de su hogar en el municipio de Fonseca en la noche del domingo.
Según él mismo contó, estar en esas condiciones no se lo desea a nadie. "A pesar de ese esfuerzo le debo agradecer a las autoridades de Distracción, Fonseca y La Guajira de verle el gesto de solidaridad con mi familia. Y creo que Dios hizo un milagro para que esté de regreso".
Culpó de su secuestro a la delincuencia común, que lo tenían un lugar inhóspito, pero era una zona muy difícil de llegar. Cerca al sitio estuvo el avión fantasma del Ejército y varios helicópteros, pero no pasó más nada.
Era escasa la alimentación: avena, panela y bocadillo era lo que consumía y tomaba agua de los arroyos, de la zona del Chorro. Dormía debajo de los árboles y se la pasaban a la intemperie, "llovía mucho, hasta cinco aguaceros en un día".
Indicó que se les escapó a los secuestradores cerca de las 4:00 de la tarde del domingo y llegó caminando al corregimiento de Chorreras, pasadas las 8:00 de la noche. "La gente de Chorreras que siempre me ha querido se movilizaron y me trajeron hasta mi casa".
Por último, indicó que, el objetivo de su secuestro fue económico, pero no reveló la cifra que le exigían los delincuentes por dejarlo en libertad y tampoco precisó si sus familiares la habían entregado.