El viceministro de Salud Pública de Colombia, Fernando Ruiz, negó ayer en una rueda de prensa en la ciudad de Bogotá, que la muerte de tres menores, de un mes, uno y diez años, haya sido por desnutrición.
El funcionario público explicó que en ese caso la enfermedad ‘es secundaria’ puesto que ‘la causa determinante’ es una malformación congénita, la estenosis esofágica.
“En uno de los casos, que ya tiene una evaluación del Instituto Nacional de Salud, hay una muerte debida a un paro respiratorio consecuencia de un desajuste metabólico, asociado con una desnutrición evidente, pero que es secundaria a un problema de una malformación congénita, el segundo caso, es un caso también hospitalizado en Barranquilla, de un niño de 10 años que muere por un problema de sepsis generalizada, un síndrome respiratorio fuerte, que estaba en el percentil más bajo nutricional, no necesariamente en desnutrición”, afirmó el viceministro.
El problema de desnutrición en el departamento de La Guajira, ha generado que su Gobernadora, Oneida Pinto, pida ayuda internacional; así lo trinó en su cuenta de Twiitter: “Colombia permitirá la búsqueda de ayuda internacional para solucionar nuestra grave crisis”.
Además, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó el año pasado a Colombia adoptar las medidas necesarias “para preservar la vida y la integridad personal” de estas poblaciones, específicamente de las comunidades indígenas Wayúu en los municipios guajiros de Uribia, Manaure, Riohacha y Maicao.
