Indígenas wayuu renuentes a las remisiones médicas en Manaure

Los padres de familias no aceptan traslado de sus hijos a otro centro asistencial y prefieren sacarlo del hospital Armando Pabón López en Manaure.

La Guajira
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El alcalde del Municipio de Manaure, Davis Díaz Rivera se mostró preocupado porque muchos padres renuncien a las remisiones médicas de sus hijos, los cuales deberían ser tratados en otros centros médicos, dependiendo de la complejidad que amerite.

 

La última situación se presentó con el menor Edwin José Henríquez Uriana, de 9 años de edad, quien se encontraba recluido en el Hospital Armando Pabón López en Manaure, y requería su traslado para la Ese San José de Maicao.

Henríquez Uriana presentó un acceso en su pie derecho ocasionado por una fractura y sus padres y abuelo se negaron a este traslado y manifestaron que ellos se lo llevaban a su ranchería Mocochinamarre ubicada en la zona de la Sabana, para que lo siguiera tratando un piache.

Ante esta situación, se trasladaron al centro asistencial la Defensora de Familia del ICBF, la Secretaria de Salud Municipal, la directora de Asuntos Indígenas, personería; quienes trataron de convencer a los familiares, al igual los médicos y enfermeras, pero la decisión era irreversible.

Una intervención efectiva, a través de la adopción de políticas, medidas y acciones, que concilie los patrones culturales de la comunidad Wayuu de Manaure, con los derechos fundamentales a la salud y a la vida de la gestante de quien está por nacer, sugirió Davis Díaz Rivera, alcalde de Manaure.

“Los menores que se encuentran en condiciones precarias de salud, privilegiando lógicamente la garantía de derechos de los pacientes que por sus condiciones de vulnerabilidad requieren de una atención especial”, manifestó el burgomaestre de los manaureros.

Este episodio se suma a dos presentados la semana anterior en que también la familia negó el traslado de los niños, los retiraron del hospital y cuando regresaron por insistencia de los líderes de la comunidad y del equipo intersectorial que trata estos casos, ya era demasiado tarde.

Igualmente, Díaz Rivera conminó a las Ese, Ipsi, Epsi, Ong’s que operan en el municipio para que cumplan plenamente con sus obligaciones constitucionales, legales y contractuales en el sector salud, en aras de evitar en lo sucesivo el acaecimiento de muertes en niños y mujeres gestantes, derivadas de actitudes indiferentes con el ejercicio de sus competencias y se dispense una mejor atención a nuestra población.

La administración municipal ha advertido a estas entidades que no tolerará una sola muerte más, por lo que una vez advierta la concurrencia de fallas atribuibles a la prestación del servicio, solicitará a cada una de las autoridades competentes, la iniciación de investigaciones de rigor y la imposición de sanciones ejemplarizante, previstas para cada caso particular. Así como tampoco permitirá que falsos líderes sigan lucrándose con el dolor y la muerte de nuestros hermanos Wayuu.