Este fin de semana se cumplió la asamblea de inicio para el proceso de caracterización de la comunidad Tugeka del pueblo Kogui, en el marco de la restitución de sus derechos territoriales étnicos.
En la reunión a la cual asistieron más de 100 representantes de la comunidad y en presencia de los mamos de diferentes cuencas de las Sierra Nevada de Santa Marta, la Unidad de Restitución de Tierras (URT) desde las Territoriales Magdalena y Cesar -Guajira, con la coordinación de la Dirección de Asuntos Étnicos y la Fundación Herencia Ambiental, (Fundaherencia) entidad que estará a cargo del trabajo de campo; se definieron los alcances y características de esta intervención.
Después de una larga jornada de deliberaciones por parte de las autoridades de la comunidad kogui, se concretó la estrategia para la recolección de información y levantamiento de pruebas. Ya con el estudio preliminar, se había identificado afectaciones por confinamiento, abandono y despojo del territorio, sin embargo, también es preciso señalar el contexto en que se generaron las afectaciones ambientales, culturales y del patrimonio ancestral para los indígenas.
La zona donde se encuentra el asentamiento Kogui es de gran importancia desde el punto de vista ancestral, pues es uno de los lugares sagrados más importantes para el fortalecimiento del ejercicio de la autoridad y del gobierno propio en toda la vertiente norte de la Sierra. Por eso se ha convertido en uno de los puntos más importantes para realizar reuniones con el Estado y con los demás pueblos indígenas. Lo anterior muestra la importancia de recuperar esta zona, central en el proceso organizativo de los pueblos de la Sierra.
La extensión del territorio titulado a la comunidad Kogui es de 408.538 hectáreas, las que componen el resguardo Kogui-Malayo-Arhuaco. La población actual está compuesta por seis comunidades asentadas sobre la cuenca del río Ancho y 5 ezwamas, o sitios sagrados desde donde se ejerce el gobierno propio por parte de las autoridades tradicionales que gobiernan la cuenca.
Es de notar que un total de 1.282 familias que ocupan la cuenca serán beneficiadas, directa o indirectamente, incluidas las 85 que pertenecen a la comunidad donde se inicia la caracterización.
Entre los acuerdos finales concretados en esta asamblea, la URT solicitó a los kogui, designar una persona de la comunidad para acompañar el esquipo que realiza la intervención, igualmente se instó a las autoridades indígenas a participar en la solución de las inquietudes que puedan surgir en el proceso, sobre el ordenamiento ancestral del territorio. Se acordó así mismo, concertar las pretensiones de la demanda final en la asamblea de cierre.
