Mujeres campesinas de Palomino trabajan la tierra

Líderes campesinas vendiendo sus frutos en el coliseo Eder Jon Medina Toro.

La Guajira
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Diecisiete mujeres campesinas de la Sierra de Palomino, se asociaron para trabajar la tierra sembrando hortalizas, verduras y frutas para contribuir a cambiar el hábito alimentario de sus familias y la comunidad en general.

 

Agustina Rodríguez, Presidenta de la Asociación de horticultora de la Sierra es una convencida que las mujeres pueden cambiar la calidad de vida de las familias, de los vecinos, y de la comunidad.

Explicó que actualmente están sembrando berenjena para comercializarla en otras ciudades de la costa, porque son productos de alta calidad que no requieren de ninguna ayuda externa para crecer.

Dijo la líder, que desde que se conformaron han sembrado cilantro, cebollín, papaya y ají.

Precisó que los productos que cultivan, los venden en la misma comunidad, con la intención de que las familias aprendan a comer verduras que difícilmente se encuentran en los platos de comida. "Somos un grupo importante de mujeres campesinas, madres cabeza de familia que trabajamos dignamente con un objetivo concreto, como todo hay altos y bajos, pero nos entendemos y seguimos adelante", dijo.

Agustina Rodríguez, aseguró que La sequía también las afectó, pero que lograron solventar la situación, llevando el agua en botellas, y en tanques logrando así sostener los cultivos durante la época de la falta de agua.

Actualmente trabajan para vender sus productos en otros sitios como la ciudad de Riohacha, por eso aceptan las invitaciones para participar de los encuentros comunitarios, donde tienen la posibilidad de generar otros ingresos. El grupo de mujeres participaron este fin de semana, en Riohacha en el Mercado comunitario y encuentro comercial, gracias al apoyo de instituciones como Chevron Ecopetrol y Corpoguajira donde vendieron una buena cantidad de berenjenas de la producción de este año.

Las 17 mujeres campesinas ubicadas exactamente en la vereda San Salvador, en la finca La Esperanza, tienen un terreno en comodato porque no poseen tierra propia para cultivar lo que a veces les causa algunas dificultades. Recordaron que ellas son víctimas de la violencia, por eso solicitan al gobierno del Presidente Juan Manuel Santos que les entreguen una tierra propia, donde puedan seguir sembrando, y continuar trabajando con ese objetivo claro como es lograr que las familias cambien sus hábitos alimenticios, consumiendo alimentos del campo.





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