Cada una de las obras cívicas que se hagan en el Distrito, sean o no del agrado de la ciudadanía, deben ser cuidadas para que la ciudad tenga una buena cara y presentación. Las tan cuestionadas jardineras de la Avenida del Libertador, hay que cuidarlas; los vecinos del sector pendientes de colaborar con el riego a las plantas y de evitar que los ciclistas hagan acciones como estas, que dañan la inversión pública que nos cuesta a todos. (Foto Edgar Fuentes)