América Latina y el Caribe han sufrido crecientes retrocesos en materia de libertad de expresión en los últimos años, lo que obliga a una atención permanente de todos los actores de la información y la comunicación.
Esa fue la conclusión principal en la 70ma Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa, SIP.
La libertad de expresión es un derecho fundamental o un derecho humano, señalado en el artículo 6.º de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, y las constituciones de los sistemas democráticos, también lo señalan. De ella deriva la libertad de imprenta también llamada libertad de prensa.
Se destacó que la situación de libertad de expresión que se vive día a día en la región nos deja sin aliento, de acuerdo a lo expresado por Edison Lanza, nuevo relator para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos, OEA.
En el marco del panel de Libertad de prensa "La relatoría de libertad de expresión", Lanza aseguró que si bien hay algunos países con situaciones más graves que otros "estamos ante una situación general de deterioro de la libertad de expresión" en la región.
Después de 30 años de recuperada la democracia en nuestros países, a veces parece increíble cómo no podemos siquiera discutir o debatir sobre estos temas.
Invitó a seguir de cerca la evolución de la libertad de expresión en nuestros países, de llevar estos temas al sistema interamericano de derechos humanos y a seguir atentos a posibles y eventuales nuevos ataques a la relatoría para la libertad de expresión.
José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch, coincidió en que la región presenta crecientes retrocesos en materia de libertad de expresión.
Consideró alarmante "que en los últimos años se haya ido imponiendo en América Latina un proceso que denomino de banalización de los compromisos colectivos para promover y defender la democracia, los derechos fundamentales, las libertades públicas, la independencia del poder judicial y la libertad de expresión".
Como ejemplo mencionó casos en Venezuela y Ecuador y advirtió sobre los riesgos que existen para la libertad de expresión en la región.
También resaltó la importancia de contar con una relatoría con carácter, fortaleza, recursos, liderazgo, valentía e inteligencia.
El estado actual de la libertad de prensa en América Latina; la gestión moderna de medios y empresas periodísticas; los proyectos editoriales y la generación de nuevas audiencias, y las últimas tendencias en publicidad dirigida a formatos digitales son los ejes centrales que se discuten en la cita.