¿Santa Helena o Ciudad Equidad?

Editorial
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Mucho antes que apareciera en la escena política de Santa Marta el actual alcalde Carlos Caicedo Omar, todo el mundo conocía en el sector de El Yucal, vía a Minca, el predio denominado Hacienda Santa Helena de tradición en la ciudad, por ser rico y productivo tanto así que quedan en el recuerdo de los samarios los grandes y frondosos árboles de mango que ofrecían una vista inigualable a todos aquellos que circulaban por dicha vía.
Ese amplio lote llamó la atención del gobierno del presidente Juan Manuel Santos para llevar a cabo allí el proyecto de Vivienda Gratuita que promueve el Gobierno Nacional, con la construcción de 4.000 viviendas de interés prioritario destinadas a la población más vulnerable del Distrito.
El desarrollo de este proyecto, localizado en los suelos de expansión urbana de Santa Marta, fue autorizado mediante el Decreto Distrital 194 de 2012 por el cual se adopta el Plan Parcial Santa Helena que, a su vez, fue aprobado por la Corporación Autónoma Regional del Magdalena, Corpamag, requisito indispensable para su adopción por estar localizado en suelo de expansión urbana, según lo previsto en el Plan de Ordenamiento Distrital.
Al respecto, es preciso señalar que en la Ley 388 de 1997 -Ley de Desarrollo Territorial- establece como procedimiento obligatorio la adopción de planes parciales para el desarrollo de los suelos de expansión delimitados por el Plan de Ordenamiento Territorial, los cuales deben ser sometidos a consideración de la Corporación Autónoma Regional o la autoridad ambiental correspondiente, con el fin garantizar la protección de los valores ambientales del territorio.
La documentación necesaria para desarrollar el proyecto fue aportada y entregada por la Alcaldía de Santa Marta, para el programa de "Vivienda Gratuita", entre los que se encuentra el Decreto 194 de 2012 por el cual se adopta el Plan Parcial Santa Helena, conservando aún el nombre de Santa Helena, para el proyecto de vivienda familiar destinado a favorecer a la población más necesitada, en el marco del Programa de las 100.000 Viviendas Gratis del Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, que sirvió como plataforma política para favorecer al presidente Juan Manuel Santos en su campaña reeleccionista y al ministro de ese entonces y hoy vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras.
Pero no fueron solo ello los que han pelechado y sacado provecho de los dineros del Estado para favorecerse en sus campañas y proyectos políticos y personales. Los sueños de una casa digna para la población vulnerable comenzaron a construirse el pasado 2 de noviembre de 2012, cuando en un acto simbólico con la presencia de cerca de cinco mil personas, se colocó la primera piedra para la construcción de 4 mil viviendas de interés prioritario que harán parte del proyecto "Ciudad Equidad", ya no Santa Helena, con la posibilidad de generar cerca de 2 mil empleos y que beneficiaría con casa propia alrededor de 20 mil personas de familias de extrema pobreza, víctimas y en alto riesgo de vulnerabilidad y debilidad manifiesta del Distrito.
En ese momento aparece el nuevo nombre dado por el alcalde de Santa Marta, con la finalidad de seguir con su proyecto político personal, que es Santa Marta, ya que hasta la misma Licencia de Urbanismo otorgada el pasado primero de noviembre de hace dos años, por la Curaduría Urbana No 1, especifica que es para la Urbanización Santa Helena.
¿Cuándo fue el cambio de nombre y cuáles fueron los motivos del mismo? ¿Por qué de un momento a otro sale con la palabra Equidad que es utilizada en su eslogan de gobierno y va impresa en todos sus actos de gobierno? ¿Quiere desde ya, dejar sembrada una semilla de asociación en la mente de los samarios para cuando se vuelva a lanzar a la arena política? O ¿quiere ser recordado como el alcalde urbanizador sabiendo que todos los que pagan impuestos en Colombia son los constructores de esos sueños de vivienda para los necesitados y que él fue elegido para trabajar por la ciudad y no para su proyecto político?
Tanta es la incomodidad de los samarios y del Gobierno Nacional con ese atrevimiento del alcalde Caicedo, que el mismo vicepresidente de la República, Germán Vargas Lleras, cuando estuvo en la ciudad la última vez firmando la entrega de los dineros para la recuperación de la vía a Minca, le volvió a llamar la atención sobre ese acto grave y alevoso de Caicedo al ponerle el nombre de su alcaldía, a un proyecto nacional.
Creemos que el alcalde Caicedo debe tratar de enfocar sus energías y el poco tiempo que le queda, a recuperar el Teatro Santa Marta; a mirar a ver si sigue sepultando la sufrida afición bananera debido al estado de abandono a que sometió al estadio 'Eduardo Santos', y a concretar, de una vez por todas, qué va a pasar con el Aeropuerto 'Simón Bolívar'.
Queremos recordarle también la necesidad de que Santa Marta no siga siendo una ciudad embotellada por falta de vías, tema al que nos hemos referido en ediciones anteriores y que sería muy fácil de articular de acuerdo con lo planteado, para beneficio de todos. De no ejecutar estos proyectos de desarrollo tan importantes para la ciudad, no solo será recordado como el alcalde que le usurpó el nombre a un proyecto a nivel nacional, sino también como el alcalde que postró a Santa Marta en sus más importantes obras y aspiraciones.