A través de todo el proceso de diálogo del gobierno con la directiva de Fecode, para levantar el cese de actividades educativas en el país, ha habido una constante, la negativa del gobierno colombiano en nivelar los sueldos a los maestros y educadores. ¿Por qué será?
Muchos han sido los anuncios de arreglo que ha estado mandando el gobierno desde el inicio del diálogo con el principal sindicato de maestros; tanto que el mismo gobierno anunció desde el pasado día 5 que llegaron a un principio de acuerdo para poner fin a los días de huelga en la educación pública que mantienen sin clase a más de ocho millones de alumnos.
Al cierre de la edición de esta página editorial y dos días después no se había producido este arreglo, en donde el gobierno ha dicho que no tiene presupuesto para afrontar la deuda con los docentes.Si el gobierno no tiene presupuesto, entonces, ¿por qué no se recoge y elimina los cinco ministerios que creó el gobierno del presidente Santos? Esa plata para darles contentillo a los aliados del Presidente y pagar las deudas electorales serviría y hasta sobraría para destinarla para la salud y educación.
La ministra Gina Parody, cuyo nombramiento fue en retribución de su trabajo electoral por la segunda reelección presidencial, ha demostrado con suficiente claridad que de educación no sabe nada y mucho menos sabe utilizar y poner en práctica los verbos dialogar, acordar, para lograr lo que ella dice que es una educación de calidad.
El preacuerdo supondría una aumento salarial de 12% para los maestros en los próximos cuatro años; mejoras en su cobertura sanitaria y bonos de ayuda para los jubilados; mantiene la polémica evaluación de los maestros cuya evaluación es utilizada como una herramienta de calidad y seguirá siendo la herramienta de ascenso para los profesores, con algunas modificaciones.
Miles de maestros de todo el país han participado en masivas marchas por las calles de Bogotá y las principales ciudades capitales, a pesar del anuncio de pre acuerdo del gobierno para evitar las marchas y el desgaste político que tiene en la actualidad el gobierno Santos.
Los colombianos sufren en el bolsillo propio la caída del petróleo, fenómeno a nivel mundial del cual no estamos exentos; pero a pesar de lo anterior, no hemos visto que el gobierno se 'apriete el cinturón' y dé ejemplos de austeridad.
Sigue siendo un Estado 'derrochón', que no se exime de nada; ha creado todos los ministerios que ha querido y los que faltan; creó también todas las Consejerías Presidenciales y ha dado muestras de complacencia para no molestar a la rama judicial manteniendo esa pesada carga, entonces, ¿por qué mejor no adelgaza el gasto del Estado y obtiene mejores resultados presupuestales?
Ahora son los maestros, mañana cualquier gremio que quiera hacer valer sus derechos; pero, cuándo llegará el turno para rebajar las costosas pensiones de congresistas, magistrados, ministros y demás? ¿Ese turno no llegará?