De autores y detectives

Columnas de Opinión
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger

Escrito por:

Francisco Galvis Ramos

Francisco Galvis Ramos

Columna: Contrapunto

e-mail: contrapunto@une.net.co



Me fascinan las novelas policíacas porque plantean y resuelven casos criminales con total cierto y son bastante entretenidas. Cada autor pone su estilo y tienen en común un caso qué resolver, un criminal, a veces ambientes problemáticos y carencia de ética y un investigador sea detective o policía.
Edipo Rey de Sófocles es quizás el texto precursor del género en el que Edipo adelanta una investigación que da un resultado insospechado, él mismo es el responsable. En la Biblia hay pasajes que en algo se asemejan al género policíaco.
En ella hay de todo, hasta lecciones de economía y buen gobierno.
En 1796 y 1818 ven la luz El Monje de Mathew Lewis y Frankestein de Mary Shelley, de tramas pavorosas que aportaron esclarecimientos lógicos a los casos expuestos. Vienen luego las ficciones de Edgar Allan Poe, entre ellos en 1841 Los crímenes de la calle Morgue, luego El escarabajo de oro y La carta robada en 1844, año este punto de arranque de la novela de misterio con la publicación de El concepto de angustia de Soren Kierkegaard y El cuervo de Poe.
De autores todavía contemporáneos me gustan fundamentalmente la señora Agatha Mary Clarissa Miller, 1890-1976 y George Joseph Christian Simenon, 1903-1989 conocidos en el mundo editorial como Agatha Christie y George Simenon. Christie sin duda ha sido la más prolífica de todos los tiempos: traducida a más de 100 idiomas y ediciones que superan los cuatro millones de ejemplares vendidos, únicamente superada por Shakespeare y la Biblia y quizás sí o quizás no El Quijote.
De su obra se destacan Diez Negritos, su novela más vendida por encima de 100 millones de ejemplares y El asesinato de Roger Ackroyd honrada como la mejor de todos los tiempos por la Asociación de Escritores del Crimen, al tiempo que Asesinato en el tren de oriente y muerte en El Nilo y la obra de teatro La ratonera representada en más de 25.000 ocasiones en el londinense teatro Ambassador.
Con menor producción y menos ventas, Simenon fue otro escritor magnífico quien, lo dijo, concebía una novela en un día y la escribía en dos semanas, algo ciertamente envidiable para cualquiera dado al arte de juntar palabras con sentido, como suspiros le habrían arrancado al doctor Turbay Ayala las dos mil amantes que dijo haber tenido.
A Simenon, traducido a 55 idiomas, con 192 novelas bajo su firma y 30 más bajo seudónimos para algo así como 550 millones de ejemplares vendidos, le cupo el honor de ser considerado por André Gide y otros como un gran escritor de todos los tiempos. El difunto filántropo, El ahorcado de la Iglesia, Una extraña sirvienta, Maigret y el caso del ministro, Maigret se defiende, Stan el asesino, La mirada indiscreta, son algunos de sus títulos.
Mucho cabría aquí acerca de este par de monstruos, como de sir Arthur Conan Doyle creador de Sherlok Holmes, ese grandioso detective tan arquetípico como Hércules Poirot de la señora Christie y el Inspector Maigret de Simenon, que entre páginas campean triunfantes esclareciendo crímenes por donde quiera los llevaron estos magos de la novela policíaca, cuya lectura no dudo en recomendar con urgencia a fiscales y policías judiciales sea que aviven sus escasas, deplorables competencias.
Tiro al aire: y para lo que son las prácticas mafiosas de la FIFA habría que contratar en conjunto a Poirot, Maigret y Holmes para las averiguaciones pertinentes relacionadas con el título otorgado a Lionel Messi.