El final, está Maduro

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Jacobo Solano Cerchiaro

Jacobo Solano Cerchiaro

Columna: Opinión

e-mail: jacobosolanoc@hotmail.com

Twitter: @JacoboSolanoC



El socialismo en Venezuela vive su peor momento, enfrentado a una movilización social, generada por los estudiantes, cansados de la dictadura disfrazada de democracia, iniciada por Chávez hace 15 años y prolongada por Nicolás Maduro, que ha llevado la economía del país al descalabro, con un desarreglo fiscal y cambiario que lo tiene a punto de colapsar; la corrupción, en su máximo nivel; un desabastecimiento aterrador y la criminalidad haciendo de las suyas. Venezuela es hoy por hoy, un país inviable, dividido y sin posibilidades, donde se desestimula y se agrede la inversión privada, son muchas las empresas que se han ido por el constante acoso del gobierno.

El aparato productivo consumido, viven de las importaciones exageradas que no solventan la demanda, conseguir un rollo de papel higiénico o un pollo, se convirtió en una verdadera odisea. Las libertades coartadas y los medios de comunicación silenciados, a los periódicos no le suministran papel, fueron clausurados los canales opositores como: Radio Caracas TV, Globovision y, recientemente, el canal colombiano NTN24 (Y Santos ni siquiera dijo nada, que vergüenza. Claro, es que eso puede afectar el proceso de La Habana.

Que Presidente nos gastamos y pensado en reelegirlo) y hasta Twitter fue censurado, bloqueando las imágenes de las protestas; muy parecido al modelo que funciona en Irán. Los presos políticos abundan y son torturados; ya enfilaron baterías contra Leopoldo López, líder opositor, como culpable de las muertes de las últimas movilizaciones y tender así, otra cortina de humo. Ante el inminente caos, se pronunciaron la Unión Europea, la ONU y EEUU, sin embargo, los países de la región guardan un silencio cómplice ante la barbarie que reina en el vecino país, así como sus mandatarios callan y se reúnen en la Celac con un dictador como Raúl Castro, entre ellos nuestro Presidente y su Alianza del Pacifico.

¿Qué viene para Venezuela? Nada bueno, porque hasta que no caiga el régimen de Maduro, quien sigue atornillado a una presidencia que ganó mediante elecciones fraudulentas, seguirá la tensión.

Si bien es cierto que la nación está dividida, son muchas más las personas que están cansadas del socialismo que lo único que ha traído son problemas y una lucha de clases que solo el tiempo y un nuevo modelo económico con más oportunidades e inversión podrán corregir.

Y digo que el final está Maduro, porque hay fisuras dentro del Chavismo, el contexto es crítico por el excesivo desabastecimiento y el hambre prima sobre la ideología; en el mismo corazón del chavismo ya la gente comienza a entender que no se puede vivir aislado del mundo.

Venezuela necesita renacer, la lucha será dura y larga, pero un presidente limitado intelectualmente, sin gobernabilidad ni liderazgo, no podrá soportar esta olla de presión en la que se han convertido sus calles, más temprano que tarde el fracasado socialismo del siglo XXI se vendrá abajo y con ello, el bloque del ALBA, que también enfrenta severos problemas: en Argentina, la gente está desesperada con el gobierno de Cristina Fernández; Ortega, sin Maduro se ahoga; Evo, tampoco anda muy bien y, finalmente, Raúl, que depende en demasía de los suministros de petróleo. Los cambios en la política del continente están por venir, ojalá los estudiantes puedan resistir y logren derrocar a Maduro, un presidente que nunca debió llegar a Miraflores.