La caída de la Reforma al Código de Justicia Penal Militar y la Patria Boba

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Jorge Caicedo Correa

Jorge Caicedo Correa

Columna: Opinión

e-mail: jcaicedoster@gmail.com



Causa pavor leer las noticias sobre la corrupción del estamento judicial frente a la caída de la reforma al Código de JPM.

Tenemos la noticia de El Tiempo del 27 de octubre del 2013 donde sorprenden a Henry Villarraga, Magistrado del Consejo Superior de la Judicatura, negociando por la suma de 400 millones de pesos vía celular, el traslado de un expediente a la Justicia Penal Militar, con un Coronel del Ejército investigado porque supuestamente se presentaron, en la unidad bajo su mando, dos muertes fuera de combate. Inexplicable que se pague esa suma para el traslado de un proceso.

El 24 de octubre del 2013, El Tiempo publica que el Magistrado Jorge Ignacio Pretelt en aras de la legalidad, acusa al Magistrado Ponente de la Corte Constitucional Nilson Pinilla y a los cuatro Magistrados que tumbaron la reforma del Código de JPM; que se inventaron un vicio que denominaron "simultaneidad".

Lo más aberrante, no es que posiblemente se haya fabricado esa decisión formalista, ni que nunca se había reconocido como vicio de procedimiento, sino que se demostró que de acuerdo a los videos y a la declaración del Secretario de la Comisión Emilio Rivera, que asegura que estuvo en comunicación constante con el Secretario General de la Cámara, para que los tiempos de cierre y apertura no influyeran en el tramite; luego no hubo simultaneidad y no se violó la ley 5 de 1992. Alguien dice una mentira y la veracidad es la base de la justicia.

Además, hace quince días, la Corte supuestamente consideró que un proyecto tramitado el mismo día no sufre de ningún vicio. Les dejo la interrogante: ¿a qué grupo favorecía ese proyecto? Seria interesante que los lectores lo indagaran.

Esta inestabilidad jurídica, influye en las operaciones militares, porque en combate se aplican las normas del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y no el derecho ordinario, además con "La Reforma a la Justicia", esta se politizó y enfrenta al estamento militar que después de haber cumplido con su deber frente a los grupos narcoterroristas, a que revisen sus actuaciones castrense unos tribunales politizados, corruptos, que inician con un precio para que su caso lo lleve la J.P.M.,que conoce el accionar militar; si no tiene el dinero, lo envían a los juzgados de Paloquemao, donde todo es tarifarío, quinientos mil o un millón, para enviarlo al Juez diez millones, pagar esas sumas y seguir cotizando hasta obtener la libertad que nunca debió perderla porque se limitó a cumplir con su deber.

El Libertador expresó: "Sigo la carrera de las Armas solamente por las glorias que ellas dan" pero no tuvo en cuenta la evolución de la vida militar y policiva en Colombia, después de un procedimiento militar o policivo exitoso puede pasar detenido porque le alteraron la escena de los hechos, le fabricaron pruebas, falsos testigos o sin dinero cayo en manos del "Cartel de la Toga" como lo denomina la prensa por no tener la salvaguardia jurídica del Código de Justicia Penal Militar.

Si los Magistrados Nilson Pinilla ponente y los que lo apoyaron, Jorge Palacios, Luis Vargas, Gabriel Mendoza y Maria Victoria Calle, obraron de buena fe, nos hace recordar a los aciagos días de la Patria Boba, el General español Pablo Morillo sitiando a Cartagena y en Santa Fe de Bogota, discutiendo si los botones de la guerrera de los Soldados debían ser plateados ó dorados ó si se les debían colocar dos ó tres botones en la manga del uniforme.

Respetuosamente, les recuerdo que en la Justicia Anglosajona ya se hubiera iniciado un juicio para determinar quien dice la verdad, el secretario de la comisión con sus videos o ellos. Para los anglosajones sus tribunales deben ser impolutos y veraces. En la justicia colombiana, una tímida apelación de revisión de sentencia.

En este caso, la situación es similar a la patria boba; los narcoterroristas atacando la infraestructura petrolera, agrediendo a la población civil cómo lo que ha sucedido en estos días en Tumaco, y nuestro Magistrado Nilson Pinilla conocido en sus publicaciones contra el Ejercito negando por un supuesto vicio de forma la reforma al Código de Justicia Penal Militar y lo mas grave, es que los hechos dicen lo contrario.