Giro de Italia

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Gustavo Hernández López

Gustavo Hernández López

Columna: Opinión

e-mail: gusherlo@hotmail.com



En septiembre del año pasado escribía en esta misma columna sobre el ciclismo colombiano y allí vaticinaba lo que acaba de acontecer en el Giro de Italia. Nuestros ciclistas pusieron muy en alto el tricolor de nuestra bandera. Estuvo en el pódium Rigoberto Urán al ocupar el segundo lugar de esta una de las pruebas de ruta más importantes del mundo, al lado del tour de Francia y la Vuelta a España.

Se obtuvo también el premio del mejor novato con Carlos Betancur apodado el Bananito, quien en una disputa sin igual dejó a la rueda al polaco Rafal Mafka digno rival, quien cedió su diferencia de segundos en la etapa de montaña de más cuesta denominada las 3 Cimas de Lavaredo, con premios fuera de categoría y de primera, con llegada en medio de la nieve y con temperaturas de ocho grados bajo cero. Realmente fue el recorrido que definió el Giro y consolidó en la clasificación general a los dos ruteros colombianos Urán y Betancur.

Se destacaron en los trayectos de montaña más duros y díficiles dada la topografía, tanto los dos corredores mencionados como aquellos que representaban al Team Colombia, es decir Fabio Duarte, Darwin Atapuma,J arlinson Pantano y Robinson Chalapud, todos ellos combativos al máximo. Constituyen una nueva generación de pedalistas, de ostensible proyección y que seguramente nos darán triunfos internacionales de singular valía.

Sería injusto no mencionar a otros colombianos que en el caballito de acero del mismo modo en esa cita ciclística sobresalieron como gregarios en otros equipos. Tales son José Serpa, Miguel Rubiano, Cayetano Sarmiento y Sergio Henao quien tuvo mucho que ver como coequipero en la formidable actuación de Rigo como se le conoce popularmente a Urán en Antioquia.

Ni el frío, ni la lluvia, ni la nieve aminoraron el paso de nuestros atletas de la cicla. Fue una demostración de pundonor, profesionalismo, ganas de triunfar y condiciones físicas que merecen elogios y felicitaciones, por cuanto sus acciones con el pedal sin dudarlo se pueden calificar de históricas, heroicas y gloriosas con miras a enorgullecernos de nuestra querida patria.

Sin lugar a discusión, ha sido una salida internacional de nuestros ruteros inolvidable y excelente. Se mostraron como los mejores escaladores del mundo. Nos recordaron al Jardinerito Lucho Herrera, pues en su época brilló en Europa como el mejor trepador, alcanzando a ser ganador de la Vuelta a España.

Estoy seguro de que de ahora en adelante seguiremos apareciendo en los periódicos en letras de molde y se verá en la televisión a nuestros ciclistas y se oirá hablar de ellos por sus performances y proezas. Será el comienzo de una serie de victorias, trofeos y conquistas que nos proporcionarán satisfacción y orgullo.

La gran ventaja es que con Urán ya como líder del equipo que lo vaya a contratar, tendrá a sus compañeros trabajándole y por ende será menos pesado su accionar en estas carreras de etapas. Hay que resaltar las inmejorables calidades de este rutero.

Es de primera en pruebas cortas, nos dio medalla de plata en la ruta de los juegos olímpicos. Araña la montaña con enorme facilidad, es un contra relojero de los mejores, en plano se defiende como si fuera un pasista de tiempo completo y bajando lo hace con relativa destreza.

El tiburón Nibali ganador del Giro, hizo gala de sus excepcionales virtudes ciclísticas y se vislumbra como un corredor que figurara y le dará a Italia muchos triunfos en las carreteras europeas. Es carta ganadora para el Tour francés y lo mismo si participa en la vuelta española.

Podemos apreciar sin pecar de optimistas que más pronto de lo que nos imaginábamos tendremos nuevamente, un campeón de una de las tres vueltas más importantes del ciclismo mundial. Urán tiene con que ganar. Nos emocionará cuando vuelva a sonar nuestro himno nacional y le impongan la camiseta del número uno de una de estas competencias de tanto renombre. Tiene talento y a pesar de su juventud, suficiente experiencia en este tipo de carreras. Le auguro muchos títulos y sus sueños se plasmarán en evidentes éxitos en su periplo futuro en las dos ruedas.

Gracias a nuestros escarabajos, que nos hacen ver que los colombianos somos capaces de las hazañas inimaginables, de materializar las descomunales empresas, habida consideración de que tenemos disposición para el sacrificio y entrega para las grandes y nobles causas.

Ante la incertidumbre que nos rodea en materia política, con serios nubarrones que oscurecen el panorama en todos los aspectos, con un proceso de paz en que imponen las reglas del juego los enemigos de la democracia y del pueblo; estas magníficas noticias deportivas al menos nos permiten pensar en las cosas buenas de este país, que son muchas pero que se minimizan frente a estos últimos hechos fatídicos que están sucediendo interna e internacionalmente.