El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), dio a conocer la semana anterior, la "Encuesta de Consumo Cultural" en el cual revela el siguiente dato: Los colombianos leen 1,9 libros por año. ¡No sabe uno qué expresar! Si tristeza o preocupación. Una cifra aterradora, que demuestra en qué grado de postración intelectual están muchos.
Cuánto no hemos disfrutado de "Cien Años de Soledad", y "El Coronel No Tiene Quien le Escriba" de Gabo; de "La Voragine" de José E Rivera; "Delirio" de Laura Restrepo; "Un Mal Asunto" de Silvia Galvis; "Lo que no Tiene Nombre" de Piedad Bonnett; "Caín" de Saramago; "El Mundo" de Juan José Millas; "El Túnel" de Sabato, y etc. O, la importancia de sentarse a leer el periódico diariamente, eso no lo hacen millones de personas, ni siquiera ahora con la ventaja que brinda el tan vilipendiado Internet, el cual permite leer diarios de variados países.
Esa inapetencia de no tener hábito de la lectura es triste. Ha faltado a lo largo de muchas décadas una política pública direccionada a la lectura. Súmele, a que los dos canales privados que deberían ser articuladores con responsabilidad social, no apuestan por grandes programas de opinión, por documentales que muestren la cruda realidad del país. Todos están empecinados en novelitas de narcos y prepagos, haciendo apologías a que haga plata cómo sea, pero haga.
Expresa el destacado escritor, Juan Esteban Constaín "Lo que yo digo es que los libros no se acaban nunca porque con ellos ocurre un fenómeno extrañísimo que podría explicar muy bien un economista, o un matemático, o un torero, a saber: que entre más se tienen, más faltan; que entre más le metemos a nuestra biblioteca, más pequeña resulta".
Por cierto, en la "Feria Internacional del Libro" que finaliza mañana primero de mayo en Bogotá, y que tiene como invitado a Portugal, no vi, ningún stand, ningún representante de la Alcaldía de Santa Marta y gobernación del Magdalena, en contraposición a otros departamentos que si enviaron delegación.