La dama de hierro

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Escrito por:

Gustavo Hernández López

Gustavo Hernández López

Columna: Opinión

e-mail: gusherlo@hotmail.com



Difícilmente habrá unas exequias con tantos Jefes de Naciones, con la Reina Isabel presente y el Duque de Edimburgo acompañándola junto con toda la realeza británica. Es un funeral no de Estado sino con honores militares, como ella bien quería y por ende el Batallón de la Guardia Galesa el más afectado en la Guerra de las Malvinas, le rendirá las honras fúnebres a la política más importante de la Gran Bretaña en este siglo XX a la par con Winston Churchill. La monarquía inglesa solamente ha asistido al entierro de dos políticos: el de Churchill y este de Margaret Thatcher.

Ella nació en Granham un pequeño pueblo británico al norte del país. Su niñez permitió vislumbrar su afán de superación académica y su capacidad de trabajo, dado que era vendedora de comestibles al lado de su hermana mayor Muriel en una de las tiendas de su padre, la cual quedaba debajo de su apartamento. Estudió química y luego su esposo Denis Thatcher un exitoso empresario le pagó su carrera de derecho.

Empezó a figurar en el escenario político cuando asumió en 1970 el Ministerio de Educación siendo Primer Ministro el conservador Edward Heath y a ese mismo personaje lo derrotó cinco años después en las elecciones del partido conservador y se constituye en la presidenta de ese partido y a su turno se convierte en la líder de la oposición. En 1979 es elegida primera Ministra del Reino Unido

Estando en el número 10 de Downing Street implementa nuevas medidas políticas y económicas que la caracterizaron en su jefatura de gobierno. Privatizó las empresas públicas, flexibilizó el mercado laboral, bajó los impuestos, destruyó el poder sindical, redujo el gasto gubernamental y desregularizó el sector financiero. Vendió las empresas del Estado y obtuvo fondos cuantiosos que le dieron fuerza a la economía que vivió al principio de su mandato, circunstancias de dificultad con el cierre de empresas, particularmente las carboníferas.

No consideraba al Estado Bienestar. Ella decía que la gente se estaba acostumbrando a que todo se lo debía resolver la sociedad, es decir el Estado. Sus problemas de vivienda y educación en su sentir tenían que ser de acompañamiento estatal pero no de integralidad gubernamental. Agregaba que "los pueblos pensaban siempre más en sus derechos que en sus obligaciones".

Su posición frente a los criminales, especialmente con el IRA, que atentó contra ella estando hospedada en un Hotel de Brighton, fue siempre firme y frontal. No les dio estatus político a los presos, por cuanto su parecer era que "el crimen es el crimen y nada más que el crimen".

En materia internacional fue la mejor aliada de los Estados Unidos. En la guerra fría no solo fue solidaria sino que tomó decisiones de envergadura y personalidad como por ejemplo facilitar sus bases de la Real Fuerza Aérea para que los aviones de guerra americanos tuviesen libertad de entrada y salida en sus pistas, contribuyendo de esa manera a la efectividad de los bombardeos que se hicieron a Libia. Además permitió la instalación de mísiles estadounidenses en territorio británico.

Así como era anti sindicalista en igual forma era totalmente anticomunista y se enfrentó a la Unión Soviética en forma tan manifiesta y directa, que por ello se le denominó la dama de hierro. Le gustaba tanto ese título que cuando develaron un busto en bronce que le erigieron en Londres frente al de Winston Churchill su ídolo como hombre de Estado expresó: "lástima que no fuese de hierro pero entiendo que es de bronce para que perdure y no se oxide".

Ella con Ronald Reagan y el Papa Juan Pablo II, fueron los artífices de la caída del comunismo en Europa del Este. Le dieron todo el apoyo a Gorbachov, con su glasnost y la perechstroiska, esto es con su apertura económica y política. Ahí terminó la guerra fría.

Su decisión sin ambages de declararle la guerra a la Argentina en las Malvinas y ante el éxito de su invasión, le dio enorme prestigio no solo en el interior de la Gran Bretaña sino allende de sus fronteras. Fue factor decisorio en su reelección en 1983.

Estados Unidos unido a Inglaterra participó inicialmente con el General Alexander Haig en la intermediación para evitar el conflicto pero el General Leopoldo Galtieri no cedió y le respondió convocando a los argentinos a esa escaramuza que sepultó al régimen militar existente. Reagan obviamente no fue neutral en este conflicto.

Estuvo a favor de la independencia de Croacia y Eslovenia. Firmó el acta de la comunidad europea pero no fue su defensora. No le gustaban las encuestas. Prefería a los refugiados blancos de Europa. Por eso decían que era racista. Sin embargo recibió 10.000 vietnamitas no comunistas.

El actual primer Ministro Cameron con ocasión de su muerte dijo: "hemos perdido una gran líder, una gran primer ministro y una gran británica".