Cada vez que los medios de comunicación de occidente, atiborran de noticias bien sea sobre el conflicto, la religión y sus gobernantes de esos maravillosos países que componen el Medio Oriente, los percibimos lejos y se termina con la sensación de que allá, conviven una cantidad de gente fanática, arbitraria, violenta, sin los más mínimos derechos, todos bajo al mando de dictadores o líderes religiosos de la peor estirpe.
Como no recordar la llamada "Primavera Árabe", donde unos jóvenes cansados de las políticas de algunos gobiernos como Túnez y Egipto, tumbaron a sus presidentes, pero se montaron otro iguales o peores, y que se convirtieron en aliados de Estados Unidos. De un momento a otro estos nuevos gobiernos tan vilipendiados por los medios de comunicación de occidente, pasaron a ser buenos como por arte de magia.
El medio oriente es la cuna de civilizaciones. En la historia mundial Irak es la Mesopotamia. Irán fue el reino persa, Egipto son sus faraones. Heredamos su exquisita cocina y obras literarias como "Las mil y una noches" y "Alí Babá y los 40 ladrones" y cientos de palabras que de allá proceden.
Y, se les olvida a los medios en Latinoamérica por ejemplo la gran migración a principios del siglo veinte de cientos de miles de árabes ("turcos", aún se les dice así porque el Imperio Otomano de origen turco, los dominaba y su pasaporte así lo indicaba), los cuales por el lado de Colombia entraron por la Costa y se asentaron en Barranquilla. Muchas de esas familias han ayudando a forjar empresas que han contribuido al desarrollo del país, asimismo se formó una generación de artistas e intelectuales de gran renombre.
Ñapa. Las vueltas que da la vida. El periodista Ramón Jimeno quien se denominaba hombre con ideas en contra del statu quo ahora está de defensor del gran capital. Este señor es quien da la cara con el tal proyecto de Los Ciruelos, defendiéndolo a capa y espada.