Con una intransigencia que raya en lo desmedido, al no aceptar que dejaron el poder y que no manejan la gran burocracia, los más recalcitrantes uribistas, a quienes les llaman los "furibistas", parece que no han entendido o no han querido entender que tenemos presidente de Colombia desde el 7 de agosto de 2010, día de su posesión y se llama Juan Manuel Santos.
¿Con qué intenciones lo hacen? Para asustar al pueblo. Esa es la respuesta. Porque el miedo se volvió política desde los ataques del 11-S, gracias a un personaje siniestro como George Bush, y logrando que el pueblo colombiano se asuste, en el imaginario ronda la cabeza a alguien que muestre fuerza, que represente autoridad y que se pase por la faja la Ley con tal de vencer el terrorismo y ese no es otro que Álvaro Uribe, porque después del mesías, él. Olvidando que gobernó ocho años y el cual demostró que por la vía militar no es la cosa.
Pero el presidente JMS, tiene otros fuertes enemigos y esos son los dos canales privados, o no, para ser claros, sus poderosos dueños que al fin y al cabo disponen qué noticia sale y cuál no. Me explico: la licitación para un tercer canal. Los dos canales descaradamente se reparten la torta publicitaria y las ganancias, no importa si pasan programaciones mediocres, de medio pelo, todo con el fin de tener embrutecido al pueblo colombiano. Nada mas esperen a que se venga todo este tema de la licitación y la fusión Uribe- Canales privados, en contra de las políticas de JMS, será una realidad, pero más peligrosa dado el poder de manipulación de los conglomerados.
No sé mis amables lectores, pero el gobierno de Santos, es mejor que el anterior. Existe más tolerancia, hay buen manejo de la economía y se ha respetado a la oposición. Dos grandes proyectos de ley en este gobierno permiten vislumbrar su gran liderazgo: el de "Tierras" y reciéntemente "Marco Jurídico para la Paz", una herramienta clave para desentramar las causas del conflicto armado.
De corazón los colombianos debemos apoyar irrestrictamente al presidente frente a sus poderosos y agazapados enemigos.