Los empresarios y toda la sociedad colombiana para aportar nuevas ideas en su producción y ser competitivos en los mercados del mundo, deben ser grandes innovadores y tener una excelente experiencia empresarial para poder afrontar con gran valentía el cambio del comercio internacional, a través de los TLC.
Con la participación de todos en la toma de decisiones, la valoración de la multiplicidad profesional, disciplina, cultura, y mucha confianza en quienes aportan nuevas ideas, serían herramientas de mucha importancia, para asegurar el mercado estadounidense y el buen desarrollo en el comercio internacional.
Los encargados de difundir la cultura y la innovación a sus empleados, es el creador de la empresa, que generalmente tiene una experiencia innovadora exitosa para convertir en líderes a todos sus discípulos.
Pero, para cristalizar en líderes a sus trabajadores, los empresarios deben efectuar grandes inversiones en tecnología de punta para obtener una producción de calidad y pueda ser competitiva en todos los mercados del mundo, en especial, en el mercado de Estados Unidos, que es el más grande del hemisferio.
Con la entrada en vigencia (mayo 15 de 2012) del TLC entre Colombia y Estados Unidos, los empresarios de nuestro país deben hacer grandes inversiones en la preparación del capital humano, con el propósito de lograr en el futuro, resultados maravillosos en el incremento de su nueva producción, en el aumento de la rentabilidad, en el mejoramiento de la posición de abastecimiento al mercado de Estados Unidos, convirtiendo sus productos en los preferidos por los consumidores norteamericanos.
El TLC con Estados Unidos es la gran oportunidad para que Colombia se oriente en una senda de crecimiento y desarrollo sostenido, de la globalización, de la introducción internacional de nuestra economía en el mercado mundial, como una fórmula infalible, para mejorar el bienestar de los colombianos en muy corto plazo.
Señor empresario, no olvide que en usted está ese espíritu emprendedor y su iniciativa de cambio para construir una sobresaliente empresa y una excelente economía, superior a la que tiene en estos momentos.
Enseñe a sus empleados y a sus familiares lo que aprendió con la experiencia; transmítales confianza para que sean capases de tomar decisiones por sí mismo, permítales cometer errores, pero oblíguelos a aprender de ellos, prepare a sus sucesores para afrontar el reto de los TLC, que se nos avecinan, y el desafío de este mundo globalizado. Competencia y tecnología son el pan de cada día.