De Ciénaga a Barranquilla, mucho por recorrer (II)

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Javier Lastra Fuscaldo

Javier Lastra Fuscaldo

Columna: Opinión

e-mail: javierlastra6@hotmail.com

Twitter: @JLastraFuscaldo


Han pasado dos meses y medio del doloroso 6 de julio en el que el estallido de un camión cisterna cobró la vida de 47 personas, vecinos de Tasajeras corregimiento de Pueblo Viejo. Estos hechos llaman a la solidaridad del país y revelan las circunstancias difíciles de esta población que convive en condiciones precarias y con la insuficiente respuesta de los gobiernos. Paradójico, para una población ubicada en un lugar declarado por la Unesco como patrimonio histórico de la humanidad con inmensas riquezas y reservas naturales.

Transitar por la delgada carretera que une a Ciénaga con Barranquilla y entrar a la Isla de Salamanca por el puente de la barra que permite el paso por encima de la intercepción del Mar Caribe con la Ciénaga Grande de Santa Marta, se aprecia la dinámica de sus habitantes quienes buscan atraer transeúntes con artesanales quioscos donde exhiben pescados, camarones y ostras a la luz del sol, restaurantes con una mejor estructura para turistas y a pocos kilómetros grupos de personas acercándose a los vehículos antes del peaje para ofrecer agua, gaseosas y las llamadas en la zona, “galleta griega”.

Con 496 años de fundado el pequeño caserío indígena de pueblo viejo, elevado a la categoría de municipio en 1929 es mucho lo que falta para mejorar su calidad de vida. Según diagnóstico del plan de desarrollo municipal el 70% de sus 33 mil puebloviejeros viven de la pesca y de la comercialización de los productos a Ciénaga, Santa Marta y Barranquilla. Si bien se han creado organizaciones de pescadores estas no son efectivas porque no existe unidad de criterio para el manejo eficiente de esta industria.

Al revisar estadísticas entre el 2005 y 2016 se encuentra que la causa principal de mortalidad de niños eran las enfermedades respiratorias y la desnutrición. Para el 2019 la situación mejoró, sin embargo, la cobertura en salud según fuentes del Ministerio es del 72% de subsidiados y su infraestructura en hospitales de segundo y tercer nivel es nula.

Los índices de educación son los más bajos del departamento del Magdalena por debajo del promedio departamental y nacional, la deficiencia de aulas y profesores hace que muchos jóvenes busquen educación en Ciénaga. Cuenta con el puntaje más bajo del Departamento en las pruebas SABER 11 con 199 puntos frente a 216 del promedio departamental.

Los servicios públicos con mayor cobertura son el gas con un 73% y la energía con casi un 99% presenta un alto índice de interrupciones y una altísima cartera a pesar de que es subsidiada por el gobierno nacional. Los servicios de agua y alcantarillado son los peores del Departamento siendo este último casi inexistente pues se acostumbraron al uso de fosas sépticas y letrinas.

Por su parte, el gobierno municipal muestra interés en el desarrollo del turismo de gran envergadura como realmente corresponde. Llama la atención el entorno ecoturístico con sus pueblos palafitos Buena Vista y Nueva Venecia, los manglares, avistamiento de aves, el escenario para el desarrollo de actividades acuáticas y deportivas. Ello requiere de grandes inversiones en el saneamiento de los cuerpos de agua de la ciénaga contaminada por los ríos que vierten sus aguas, así como proyectos para un adecuado tratamiento de las aguas servidas de los pobladores rivereños y palafitos. Ya se cuenta con un parador turístico, ahora se requiere volver limpio y amable el entorno para aprovechar la condición de patrimonio histórico de la humanidad.