El último episodio del rifirrafe o disputa mediática entre el Presidente Uribe y Daniel Samper Ospina nos deja múltiples reflexiones y enseñanzas. Lo más importante es que este es un episodio periférico de la vida nacional. El panorama político de 2018 es tan delicado y lo que está en juego es tan grande que el Presidente Uribe no debería estar “gastando pólvora en gallinazos”.